viernes. 19.04.2024

Se estima que a nivel mundial se desperdician 1.300 millones de toneladas, es decir 1/3 de la producción mundial, del total, 89 millones de toneladas corresponden a Europa, y la comida seguía en buen estado. Este último dato es el alarmante, la comida seguía en buen estado. Entonces, llegamos a la conclusión que este desperdicio podría evitarse.

Normalmente el problema es debido a malos hábitos de consumo y de compra. Cuando un producto ya no tiene buen aspecto o está cerca su fecha de caducidad, se desperdicia, o bien, en los supermercados porque no consiguen venderlos, o en los hogares, porque no los utilizan, siendo ese producto totalmente apto para el consumo humano.

Los estudios revelan que los alimentos se tiran sin procesar, es decir, no han sido cocinados, no son restos de comidas. Las frutas, hortalizas y verduras son el grupo de alimentos que más se desperdician en los hogares.

Esto afecta mucho más de lo que nos pensamos en el medio ambiente, ya que para producir esta cantidad de alimentos se necesita usar más recursos limitados como el agua.

Un ejemplo que seguir es Dinamarca, que en 5 años redujo un 25% el desperdicio alimentario, y ¿cómo lo hicieron?

Cambiar la forma de operar de los supermercados

¿Dónde adquieren los alimentos las familias? En el supermercado. Así que el primer paso fue intentar convencerles a colaborar. Lo que se hizo fue cambiar la forma de promocionar los productos. En vez de hacer 2x1 se empezó a hacer promociones en la unidad. El planteamiento era hacer comprar a los consumidores solo lo que necesitaban. Y funcionó.

Los consumidores pararon de comprar a cantidades y pasaron a comprar lo que realmente necesitaban, así se desperdicia mucho menos.

Otra acción que han llevado a cabo ha sido poner neveras con los productos a punto de caducar. Estos están rebajados y llevan una pegatina amarilla como distintivo.

Implicar a los restaurantes

El sector de la restauración ocupa el tercer lugar en ranking de sectores que más desperdician. Los daneses lo tuvieron claro, allí también habían de intentar algo. Aquí entro en juego una App “Too good to go”, esta App consiste en que los restaurantes se apuntan a ella y al final del día ofrecen a un precio muy bueno las sobras de ese día. En esta App también se han sumado las panaderías.

Esta App ha tenido tanto éxito que las colas a última hora delante de los restaurantes son larguísimas.

Iniciativas innovadoras

Una de las iniciativas innovadoras es la App que ya hemos comentado, un éxito retundo y de fácil aplicación.

Otra de las iniciativas ha sido abrir un supermercado en el que todo lo que se vende tiene “mala pinta”. Fruta, verdura y hortalizas tocadas, con algún fallo estético, pero totalmente aptas para el consumo. De momento este supermercado está solo en Copenhague, pero pronto abrirá en otras ciudades.

Y no solo cuidan el medio ambiente a través de luchar contra el desperdicio, sino que también intentan reutilizar la ropa, los electrodomésticos… etc. Es muy habitual encontrarte tiendas de segunda mano dónde puedes encontrar desde microondas a una pajarita naranja.

Todos deberíamos tomar ejemplo y empezar a reducir nuestra huella contaminante.

Adriana Vázquez Farràs, autora de este blog

Desperdicio alimentario, el enemigo del planeta