López comenzó hablando del estudio ESNUPE CLM, un estudio realizado por Los pediatras de Atención Primaria de la región que analizan los datos antropométricos (Peso y Talla) de 251.152 menores de 15 años nacidos en la Comunidad entre el 1 de enero de 2001 y el 31 de diciembre de 2015 y entre los muchos datos que nos ofrecen destaca que Valdepeñas se posiciona como la segunda población de CLM con (12,2%) en obesidad infantil, frente al 10,6% de la Comunidad Autónoma.
"Una señal que nos habla de los graves problemas de conducta alimentaria que viven nuestros jóvenes", añadió López.
Otro de los temas fue los problemas que una cintura ancha puede provocar en el organismo "ya que se considera un signo de ACUMULACIÓN DE GRASA VISCERAL, un tipo de grasa peligroso que rodea los órganos internos y que está fuertemente relacionado con la diabetes tipo 2 y con las enfermedades cardiacas".
Además, explicó que se reconoce que hay relación entre el cortisol “hormona del estrés” y la grasa visceral y cómo el cortisol influye sobre la hormona LEPTINA, hormona capaz de disminuir el apetito mediante la aparición de la sensación de saciedad y se considera que el 95% de las personas con aumento de peso está relacionado con la RESISTENCIA A LA LEPTINA. Una información científica tratada con un lenguaje sencillo, de manera coloquial y llevada a la realidad alimentaria diaria, puede ayudar a entender el daño que podemos producir en la salud con el abuso de AZÚCARES INVISIBLES en alimentos como: refrescos, yogures, leches fermentadas y postres lácteos, pastelería, bollería, galletas, zumos, néctares de fruta, chocolates y alimentos derivados, otros… Así como, el consumo de alimentos de alto índice glucémico y el aumento de alimentos procesados, en nuestras mesas, entre los que podemos encontrar ocultos: el 80% de sal, el 75% de azúcar y un 44% más de grasa que hace 40 años (Fuente: La Alimentación insana: una epidemia mundial –VSF Justicia Global alimentaria).
El consumo frecuente y la cantidad de estos alimentos, unido al desconocimiento de la lectura del etiquetado de los alimentos, nos lleva a un consumo perjudicial y nos priva de poder elegir lo más saludable… Causas todas ellas del aumento de grasa visceral, de obesidad, desnutrición, resistencia a la insulina, diabetes tipo 2, algo inusual en jóvenes que está empezando a ser real, al igual que los problemas cardiocirculatorios y problemas de conducta.
Por ello, esta experta considera "conveniente difundir e informar al igual que trabajar con las AMPAS de colegios e institutos y otros colectivos, como: asociaciones de vecinos, de mujeres, etc. para ayudar a tomar conciencia y producir cambios en la conducta alimentaria que mejore nuestra salud y la de nuestros hijos y nos ofrezca la posibilidad de “Ser parte activa en el equilibrio de nuestra Salud”.
