viernes. 19.04.2024

¡Qué risa!

La insoportable situación en que se encuentra Cataluña, es consecuencia, entre otras, de la falta de concordia entre las diferentes sensibilidades. Nos hemos dedicado a machacar al adversario y así seguimos. Desde esta columna venimos sosteniendo que los frentes nos han conducido a donde estamos. Y en plena campaña, lejos de abandonar esos frentes seguimos alimentándolos. Basta observar a la mayoría de los líderes. Seguramente que lo hacen por estrategia electoral; pero se están equivocando. El frentismo ha sido la ruina política y social.

Independentistas y constitucionalistas, -qué risa- siguen a la greña, sin ceder un milímetro de su errónea posición. Los independentistas hacen muy bien en defender su ideología, su identidad. Es loable el empeño que ponen en ello. Pero lo que no pueden hacer, lo que han hecho, es tratar de declarar la independencia cuando sus apoyos no llegan ni a la mitad de la población. Y entonces para compensar ese déficit se les ha ocurrido la impresentable determinación de cometer toda clase de atropellos. Así, el final es, el que ha sido, un auténtico desastre.

Enfrente están los constitucionalistas, -que risa-. “Los defensores de la Constitución”. Incluso los que otrora no la querían. Defender la Constitución es una tarea, además de obligada, loable. Hacen muy bien en cumplirla y hacerla cumplir. Pero, -qué risa-, defienden los apartados que se refieren al funcionamiento “legal” de las instituciones, pero se olvidan de los apartados referidos a la defensa de los derechos y libertades de los ciudadanos. Se han fijado en el artículo 155, y en el referido a la unidad de España. Muy bien, pero les aconsejo a PP y Cs, que se lean también entre otros los artículos: 1,14,27,31,35,47,48,50, y 51. ¿Tendrán la decencia de seguir llamándose constitucionalistas?

No se trata de frentismos, se trata de poner encima de la mesa propuestas, soluciones para integrar, para enmendar la fractura, para defender los derechos de los ciudadanos, para luchar contra la pobreza, contra la desigualdad, contra la precariedad, contra la corrupción. No busquen alianzas basadas en patriotismos y banderas, busquen alianzas basadas en el bienestar de los ciudadanos.

Julio García-Casarrubios Sainz

http://juliocasarrubios.blogspot.com.es/

¡Qué risa!