Todo comenzó por la mañana cuando Pilar, mi compañera, me llamó para decirme que se le había ocurrido una idea: “hablar con Luis Palencia para ver si quiere que antes del gran partido de la tarde, el club le regalara a Estela una camiseta del equipo”. Lógicamente, sabíamos que era un buen lugar para que la gente oyera hablar del Autismo y conociera el rostro de quien tiene este trastorno, con el objetivo de concienciar. ¡Imaginaos con un pabellón lleno hasta la bandera!, había que conseguirlo. A partir de ahí, pusimos la maquinaria en marcha: hablé con Luis Palencia, este dijo que sí, habló con Rosa de Bolas Sport, que llevó la camiseta y al personaje de Disney, Goofy. El F.S. Valdepeñas y Advaldepeñas nos unimos por una causa solidaria, todo un orgullo para nosotros que un gran club como este nos apoye en algo así.
A las 18:00 horas llegó el gran momento, los papás de Estela estaban nerviosos, la niña tranquila, expectante, aunque ya sabía algo porque su madre, Cintia, se lo había contado de la forma que “solo ella sabe contárselo a su estrella azul”. Un momento muy emotivo en el que Estela, acompañada de sus padres, de Luis Palencia y Goofy, sale al centro del campo, arropada por los aplausos de los miles de aficionados que allí se congregaban, para recibir la camiseta azul del equipo que cada semana hace las delicias de los valdepeñeros, el Massey Ferguson/Bodegas Fernando Castro F.S. Valdepeñas.
Estela fue el centro de atención, pero el acto fue un homenaje a todos esos niños y niñas, que junto a sus familias viven día a día con este trastorno, que nada más ser diagnosticado cambia sus vidas para siempre. El amor, la paciencia y las ganas de luchar es lo que les mantiene a flote, pero también necesitan del apoyo, la solidaridad y la concienciación de toda la sociedad, porque “si a esa sociedad le enseñamos a aceptar la diversidad como algo normal, no será necesario hablar de inclusión, sino de convivencia”.
Gracias Luis por tu solidaridad, por no pensarte ni un segundo tu “sí”, gracias por hacer que el día de ayer sea inolvidable para Estela y sus padres.