jueves. 25.04.2024

Un buen día decidió dedicarse profesionalmente a interpretar, se formó en la RESAD y ha participado en las series de televisión De repente los Gómez y Toledo. Tuvo la suerte de compartir escenario con Blanca Portillo en Hamlet y ahora la obra de teatro que dirige, Los otros y nosotros, ha sido seleccionada finalista en la Muestra Provincial de Teatro de la Diputación.

¿En qué momento te diste cuenta de que querías ser actor?

Tomé la decisión de dedicarme a esto con 16 años pero empecé en el grupo de teatro Lorenzo Medina con 8 años. En realidad quería ser profesor de Educación Física pero de repente decidí ser actor. Recuerdo que mi madre se quedó blanca cuando le dije que me iba a Madrid a estudiar.

Durante tus estudios de Interpretación en la RESAD hiciste algunos trabajos en el teatro y en televisión…

Sí, cuando estaba cursando tercero me surgió la oportunidad de participar en la obra de teatro Hamlet, de Tomaz Pandur, con Blanca Portillo y Hugo Silva. Al terminar, grabé la serie De repente los Gómez. Entonces dejé mis estudios y volví al año siguiente.

¿Cómo te llegaron ambas oportunidades?

Lo de Hamlet fue porque conocía a Blanca Portillo y llamó a mi representante para que participara en la obra. Y la serie fue por casting pero Blanca me ayudó a preparar las pruebas.

Si tuvieras que elegir a alguien que te haya echado una mano en tu carrera, ¿esa persona sería Blanca Portillo?

Blanca me ha ayudado bastante. Pero también le tengo que dar las gracias a Rubén Bustamante, que fue quien me ayudó a preparar las pruebas para entrar en la RESAD.

En verano estrenasteis en Valdepeñas la obra de teatro Los otros y nosotros, que ahora ha sido elegida finalista en la XXII Muestra Provincial de Teatro de la Diputación. ¿Cómo surgió hacer esta obra?

Me llamó Rubén (Bustamante) para hacerla. Me dijo que buscara a varias chicas para hacer los papeles de mujeres pero no quise. Pensé que, para no caer en clichés y parecer Matrimoniadas, estaría bien que los papeles de las mujeres estuvieran interpretados por hombres. El fin era pasarlo bien, nos juntamos y en los ratos libres la montamos. Cuando la estrenamos, la mandamos a la Diputación y ahora somos finalistas. No nos lo esperábamos porque es una obra de teatro tipo cabaret hecha para cafés-teatro.

¿Cuál es el argumento?

Trata de un grupo de actores que representan obras de teatro. Así, se muestran las dos caras de una obra de teatro. Por un lado, está la que se escenifica y, por otro, el interior de los camerinos. Está hecha en clave de comedia. La adaptación la hizo Rubén (Bustamante) a raíz de textos de escritores sudamericanos.

¿Hay oportunidades para los jóvenes actores ahora mismo?

Siempre ha estado difícil pero ahora más. Antes había más ayudas por parte de organismos públicos pero ahora hay que tirar de fondo de armario. Pero, en cambio, ahora surgen nuevos movimientos, ya que parece que en tiempos de crisis hay más creatividad. La gente piensa más en hacer cosas nuevas y diferentes.

¿Tienes algún modelo de actor para seguir?

Marlon Brando. También me gusta Al Pacino. Y entre los actores españoles me quedo con Javier Bardem. Me gusta mucho cómo encarna a los personajes.

¿Y con qué director te gustaría trabajar?

Con Almodóvar. No sé si es porque los dos somos manchegos pero veo algo en sus películas que resulta cotidiano para mí, lo veo como cercano. Pero, en cualquier caso, es simple hecho de grabar una película es bueno, sea con quien sea. También me gusta mucho cómo dirige Gracia   Querejeta. Y si tuviera que elegir una compañera de rodaje sería Blanca Portillo, en cine, teatro o lo que sea.

¿Qué prefieres, el cine o el teatro?

Prefiero el teatro. La tele me gusta, es más dinámica, más rápida, pero la escena la haces una vez y no la haces más, se queda así. En cambio, el teatro está siempre vivo, entras en contacto con el público, y siempre estás creando. Si fallas un día, se puede corregir al día siguiente.

¿Cuál es tu sueño?

Llegar a los 65 años y jubilarme trabajando como actor. Si puedo vivir toda la vida de lo que quiero sería más que un sueño para mí.

 

Manuel Moya: "Pasarme toda la vida trabajando como actor sería más que un sueño para mí"