jueves. 28.03.2024

El próximo sábado 2 de diciembre, a las 20:00 horas en el Auditorio de la Veracruz, la escritora valdepeñera Rosa Peñasco será la encargada de rendir tributo al vino nuevo y la poesía en la tradicional cata que organiza el Grupo Artístico y Literario “El Trascacho”. Con Rosa hemos hablado sobre lo que supone para ella exaltar el vino y la poesía.

¿Qué supone para ti ser la exaltadora del Vino Nuevo y la Poesía, en un acto como el del Trascacho?

Imagínate… ¡Para mí en un grandísimo honor! En un principio, a cualquiera que no conozca el sentido de una “Exaltación del vino y anochecer poético” de El Trascacho, puede parecerle un evento local, sin más. Pero no es así porque aun siendo un acto típico de Valdepeñas y conste que siempre gracias a El Trascacho, trasciende, con mucho, nuestras fronteras. Da un poco de vértigo y responsabilidad también porque no hay más que ver la talla artística o profesional de cualquiera de los 48 exaltadores anteriores. Nunca me cansaré de darle las gracias a El Trascacho por haber contado conmigo para exaltar la poesía y el vino nuevo y, de esta forma, contribuir a eliminar el terrible prejuicio de que “nadie es profeta en su tierra”.

Eres, desde hace tiempo, la primera mujer a la que eligen para este acto ¿Crees que somos las más idóneas para exaltar vino y poesía, debido a nuestra sensibilidad o no?

Por suerte, no creo que el vino entienda de sexos… El vino es tan universal como el Universo mismo y quienes lo sentimos como el caldo de los dioses que en verdad es, lo amamos con independencia de ser hombres o mujeres. Ahora bien: sin llegar al frikismo de entonar la letra de Manolo Escobar con eso de “viva el vino y las mujeres”, sí quisiera alzar mi copa para compensar este desequilibrio entre hombres y mujeres. Sin competiciones absurdas y con humildad, me gustaría dejar alto el pabellón de las mujeres para equilibrar las pocas mujeres que han exaltado antes el vino…

rosapeñasco2 (Copiar)

¿Qué vas a contar al público en tu intervención?

Voy a invitar a todos los asistentes a un análisis del sentido del humor típicamente manchego o, en otras palabras, un viaje hacia nosotros mismos, porque conocerse a uno mismo, es a fin de cuentas "la mayor aventura jamás contada". Los vehículos utilizados para realizar este especial tour serán el vino y la poesía, claro está, pero siempre vehículos que nos ayudarán a llegar a un destino tremendamente serio y muy particular: “El humor y el surrealismo en La Mancha o el lugar en donde lo normal, es lo no normal" ¡Y no puedo revelar más!, pero sí asegurarte que van a escucharse muchas risas ese día...

Eres escritora, jurista y una mujer muy polifacética ¿Qué es para ti el vino maridado con la poesía? 

Aunque la tapa o “la tapeja” como decimos en La Mancha, sepa a gloria cuando tomamos un vino, debemos comprender que el gran maridaje con el vino no se produce con comida, sino con poesía. Vino y poesía se me antojan como el big-bang porque son, desde el origen de los tiempos, dos fuerzas que siempre han movido el mundo…

También eres poeta, además de escritora de novela, ensayo… y tienes premios de poesía ¿Qué debe tener, según tu punto de vista, la poesía ganadora de este acto? 

Alma, vida y sentimiento por todos los poros… Personalmente, me niego a que la obsesión por la forma pueda asfixiar la esencia jamás. Muchas veces, los academicistas han matado el arte sólo para camuflar el drama de su total ausencia de creatividad como, sin ir más lejos, cuando la Academia de Bellas Artes de San Fernando, por ejemplo rechazó a Gaudí por innovar las formas curvas. Las diferentes formas o formatos para expresar unas cosas u otras me encantan y seducen, pero nunca pueden convertirse en una cárcel o una horma que todo lo retuerce y fuerza hasta ahogar lo que de verdad tiene el alma. La creatividad es chispeante, libre e indómita: ¡y esa es su grandeza! El vino también lo es, aunque una y otro, sigan determinadas reglas, procedimientos o formas para poder ser degustados… Por eso me encantaría que estas poesías transmitieran vida, ¡con mayúsculas!, y desde su primera sílaba, tanto si fueran sonetos como si fueran versos libres.

Háblanos de los proyectos literario que tengas en mente

¡Buff!, tengo una racha de mucha actividad creativa, fascinante porque me encanta y me da vida, pero excesiva porque no me da la vida para nada más...

Acabo de participar con “Quijote Quejumbroso”, o un cuento escrito en su totalidad con la letra Q, que formará parte de una colección de cuentos, vendidos con fines humanitarios, que además será traducida al euskera.

Además, a sólo cuatro días de la exaltación del vino, es decir, el jueves 7 de diciembre, en Valdepeñas vamos a asistir a un evento único porque a las 19:00, se presentará en el Centro Cultural La Confianza, un cuaderno poético y gráfico precioso y muy simbólico. Se titula "Cuaderno de banco", y gracias a la profesionalidad de los navarros Daniel Albors y a Juan José Pastor que, por muy increíble que parezca, han sido capaces de reunirnos a todos, en este libro participamos 22 poetas valdepeñeros de estilos, trayectoria y edades muy diversas. Para mí es emocionante porque mi abuelo materno, ya participó en otro libro parecido en su época.   

A ratos, intento ir llevando al papel la conferencia de El Trascacho porque sin darme cuenta y con la excusa de "El humor y el surrealismo en La Mancha o el lugar en el que lo normal, es lo no normal", he investigado hasta hacer un ensayo. Eso al menos me han dicho varios entendidos, aunque lo de publicar siempre es un enigma en cuanto a cómo y dónde. Si tiene que ser será. La vida dirá...

Pero si ahora hay algo que ahora me tiene absorbida e inmersa en una experiencia que además es totalmente nueva para mí, es la escritura de "Doce balas en el alma", o la biografía de un grandísimo ser humano con vivencias únicas, de esas que sólo vive una persona entre un millón. Aun con mucho agotamiento entre tantas y tantas cosas porque el día debería tener cuarenta y ocho y no veinticuatro horas, escribir sobre la vida de un ser tan excepcional a quien mando un fuerte abrazo desde aquí y cuya identidad no puedo revelar por expreso deseo de su protagonista, me tiene totalmente fascinada. Agradezco enormemente esta nueva experiencia humana y literaria que vuelve a corroborar mi idea: para lo bueno y para lo malo, ni puedo ni quiero evitar ser una escritora de alma porque como Fito, yo también "escribo como sangro y sangro como escribo".

2017 ya está terminando, ¿qué le pides a la vida para 2018?

Primero salud para no tener que escribir otro capítulo de “Con mi gran sentido del thumor” (ya me entiendes). Y este nuevo año, y siempre, seguir VIVIENDO y no sólo sobreviviendo, pero vivir ¡y con mayúsculas!, esta gran aventura llamada vida: con amor, amigos, creatividad, experiencias, emociones, alegría de vivir y la misma curiosidad por la vida que cuando era niña. Sin curiosidad y pasión morimos lentamente...

(Imagen de Rosa Peñasco cuando era pequeña)

rosa peñasco de pequeña

En este y en cualquier otro año que acabe y empiece, quiero volver a brindar por Neruda, para poder gritarle otra vez: "Amigo Pablo, yo también ¡CONFIESO QUE HE VIVIDO!”

Rosa Peñasco: ‘Exaltar el vino y la poesía del Trascacho contribuye a eliminar el...