¿Por qué se llama Ángeles en el Laberinto?
Se llama así porque es una desintegración de las apariencias: los que son buenos, no lo parecen y los malos, malísimos, maltratadores y corruptos, parecen impecables… Y como es una novela policíaca en la que hay una brutal corrupción en la universidad, los tribunales, la economía y los medios de comunicación y todo el mundo está vendido al mejor postor, curiosamente, unas cuantas personas (frikis) denostadas socialmente por diversos motivos, son las que desmantelan todo el tinglao… Por eso son ángeles, pero ángeles atrapados en un laberinto de corrupción y miserias. Los mismos ángeles que hacen lo imposible para luchar por lo que es justo, cuando los tribunales, la universidad, la política, la economía y los medios de comunicación están podridos.
¿Cuánto tiempo te ha llevado escribirla?
La empecé a esbozar, compulsivamente como siempre, en el año 2008… Después, lo que era un borrador, se convirtió en novela. Pero resulta curioso porque está ambientada precisamente en esos años pre-crisis, demostrándonos continuamente que la naturaleza humana siempre es la misma, bien cuando se inclina por el lado de la justicia o bien por el lado de la injusticia… Está claro que de aquellos barros vienen estos lodos.
¿A qué genero pertenece y por qué?
Es policíaca y con una trama brutal que, hacia la mitad de la novela, adquiere unas densidades que me superaron cuando la escribía… Pensaba: ¿y ahora cómo salgo de aquí? Menos mal que la imaginación da para mucho y me permitió introducir algunos personajes nuevos, sacados de la manga en el último momento, para poder llegar al desenlace final…
¿Dónde se podrá adquirir en Valdepeñas?
En las librerías habituales y en el Café con Letras, por supuesto.
¿Por qué la presentas en Café con Letras y si después la presentas en otras ciudades?
Hay varias presentaciones a la vista, pero la primera es Valdepeñas, como debe ser… La segunda, el viernes 22, será en una librería de Chueca, con motivo de “la noche de los libros” en Madrid.
Hace un par de meses, en Café con Letras hicimos un recital de las poesías místicas inéditas “El cielo en la tierra”, y fue genial. Este sitio es mágico, lo digo siempre, y Nieves, Lucía y Mariví, son tres seres especiales que han creado un entorno único y lleno de cultura y buen rollo en Valdepeñas. Por eso la presentamos allí.
¿Qué nos vamos a encontrar en esta novela. De qué va?
No eran conscientes, pero un periodista traumatizado que terminó convirtiéndose en lutier, una abogada de las causas perdidas, un gótico deprimido que duerme en su ataúd, dos astrólogas amantes de Kepler, un hacker “índigo” fanático del movimiento ciberpunk, un escultor obsesionado con utilizar sus cinceles para pinchar las ruedas de los coches más caros aparcados en la Universidad, una resuelta secretaria de un centro de salud rural y un cartero manchego que come chuches con obsesión mientras sueña con encontrar al gran amor de su vida, tenían mucho en común: no sólo eran frikis y habían sufrido el rechazo social… También eran ángeles atrapados en un laberinto de corrupción y miserias. Los mismos ángeles que hacen lo imposible para luchar por lo que es justo, cuando los tribunales, la universidad, la política, la economía y los medios de comunicación están podridos.
“Ángeles en el laberinto”, nos sitúa ante el drama y los enigmas de una novela policíaca, junto con la acidez, casi cómica, de los peculiares métodos de investigación utilizados por un grupo de frikis-ángeles que como Sanchos y Quijotes del siglo XXI, van haciendo de las suyas en entornos dispares de Madrid y Valdepeñas,en pleno corazón de La Mancha…
¿Ha sido difícil mezclar mundos y personajes tan dispares?
Ha sido difícil porque para dar vida a cada universo-personaje, he tenido que investigas sobre muchos submundos: los astros, el vino, derecho, periodismo, informática, literatura… Ahora, viendo el trabajo terminado, me he dado cuenta que “Ángeles en el Laberinto” es en sí un Universo con muchos planetas. Quiero decir que frente a la corrupción, el abuso de poder y la maldad, hay una novela coral con decenas de personajes, casi estereotipos, que son en sí mismos un universo que nada tiene que ver con el de otro, salvo las sístoles que laten para hacer el bien o las diástoles que laten para hacer el mal.
¿Qué supone para ti esta novela, tiene algún significado especial?
Tiene un gran significado porque está ambientada en Valdepeñas y en Lavapiés, un barrio de Madrid que adoro. Y el significado especial es que da igual el lugar en el que se vive o se nace, cuando lo que te late por dentro como a Sanchos y Quijotes del siglo XXI, es la lucha por la justicia… Para mí también es especial porque quise honrar a nuestra tierra, ensalzando su surrealismo natural y su humor lacónico y a veces delirante, mezclando las peripecias de algunos manchegos de pura cepa, con las de otros que viven en pleno centro de Madrid. Ha sido maravilloso describir el zócalo añil, la plaza, el casco antiguo y, sobre todo, las bodegas, que son en realidad inmuebles llenos de misterio: entornos ideales para una novela policíaca…
¿Qué proyectos literarios de futuro tienes?
Tengo dos novelas a medias: “Peregrinas” y “Mujer índigo”, pero ahora, después de las poesías místicas y la novela ´Ángeles en el laberinto”, me gustaría parar un poco antes de volver a hacerle caso a la musa.
¿Por qué hay que comprar tu libro?
Porque te vas a reír, a identificar, a deleitar con Valdepeñas y sus personajes que terminarán mezclándose con otros absolutamente anónimos y urbanos, por la riqueza emocional de cada uno de estos protagonistas de esta obra coral… Porque no sabrás por donde se desvelará el misterio hasta el último segundo, porque es una buena excusa para entender la crisis que vivimos y muchas de las voluntades que intervienen en ella y porque… ¿Por qué no?
