¿Quién es Silvia Salgado?
Esa es una pregunta difícil para empezar, porque tengo muchas Silvias dentro. Pero en definitiva, una persona corriente con una vida viajera. Una nómada reincidente que siempre se queda con lo mejor de cada lugar. Al fin y al cabo, el cielo siempre es el mismo. Esa es mi premisa vital. Creo que la de “mamá” es la mejor de mis versiones. Sin dudarlo, la que más me gusta.
Vuelves con novela, “La Aldea” es tú última obra. ¿De qué va y que sensaciones puede causar al lector?
‘La aldea’ es la historia de los dos viajes que realiza Carlota Santamaría, arquitecta y madre separada, justo cuando creía que su vida estaba más ordenada: uno, al continente asiático, para abordar la reconstrucción de una aldea que colapsó tras un terremoto; otro, el más importante, el que le permite viajar a través de sus emociones para volver a encontrarse con ella misma.
El lector va a encontrarse con una historia sorprendente, pues “La aldea” es también una aventura que novela unos acontecimientos que sucedieron más allá de mi imaginación como escritora. También con esa sensación que a todos nos sacude alguna vez, la de estar perdidos y querer reubicarnos.
Tu primera novela fue “Mientras hilan las mariposas”, un éxito de autoedición en las redes sociales. La familia, la superación, el amor, son ingredientes presentes en tu narrativa que se acentúan en “La aldea”. ¿Son una constante en tu obra?
Son una obsesión en mi vida. También en la literatura. Me interesan las emociones que sugieren lo cotidiano. Lo más grande ha sido más pequeño antes. De la familia, surgen ramificaciones que hay que explorar: la infancia, la capacidad que tenemos o no de amar, la relación con nuestros padres, casi siempre auténticos desconocidos. Miedos, inseguridades, pero también fuerza, rebeldía, capacidad de superación… ¿puede haber algo más revolucionario que el amor? ¿No te parece que la familia es el país más difícil de gobernar?
¿Se te pueden criticar los finales felices?
Por supuesto, soy una optimista compulsiva. Busco siempre el lado bueno de las cosas.
Volvamos a “La Aldea” ¿Cuánto tiempo te ha llevado escribirla y si está basada en algo personal o es imaginación de escritora, o alguna experiencia que conozcas?
Los lectores van a encontrar una historia sorprendente en “La aldea”, que ha creado unos personajes y novelado unos hechos que fueron reales. En el año 2008, Chengdu, en la provincia de Sichuan, sufrió un terrible terremoto. Se perdieron muchas vidas, en especial la de muchos niños que estaban en la escuela cuando eso sucedió. Hubo una gran polémica por la construcción fraudulenta de edificios, mucho dolor, mucho silencio de las autoridades. Ya entonces me sobrecogió esa historia. La tierra tiembla en tan solo unos minutos, luego todo vuelve a empezar. ¿No es fascinante? Sucede a diario, la mayoría de nosotros sufrimos en algún momento “un temblor bajo nuestros pies” y hay que volver a empezar. La vida siempre sigue.
De mí no hay nada, o casi nada. Hace unos días me escribió una gran amiga y me dijo que no era cierto: “está tu amor por los libros, tu obsesión por el mar, y el amor que profesas a tus padres”.
Has vivido muchos años en Valdepeñas y has dejado buenos amigos ¿Qué supone para ti esta tierra y si vas a presentar aquí tu libro?
“Quien tiene una bonita infancia, está salvado para siempre”. Valdepeñas tendrá para siempre el mejor de los espacios en mi corazón, porque ha sido la infancia de mis hijas. Cuando llegué, me sorprendió la fuerza de su tierra roja, la bondad de sus gentes. Hay muchas personas aquí a las que no voy a dejar de querer nunca.
Por supuesto, espero presentar “La aldea” en Valdepeñas, pero es la editorial la que marca la agenda.
Fuiste la impulsora del club de lectura Macondo ¿Sigue activo?
Sigue activo. El club de lectura Macondo fue una maravillosa iniciativa de la dirección del Colegio San Agustín (allí estudiaron mis hijas). Padres y amigos del centro siguen reuniéndose mensualmente. En la actualidad formo parte del Club de lectura de Oleiros (A Coruña). Desde aquí, animo a todos los amantes de la lectura a formar parte de estas iniciativas, pues permiten conocer autores y obras que de otro modo te serían ajenas. Es muy enriquecedor.
¿Plasmas todo lo que enseñabas en este club en tu web tulipanes de fresa?
Tulipanesdefresa es mi blog más personal. Allí hablo de algunos de los libros que leo, que son muchos, pero únicamente desde la emoción que a mí me sugieren. Los libros son como las ciudades, tan impactantes o no como el día o época que las visitas. Después hay un espacio que yo llamo Tic, tac, donde hablo de lo que me cruza el corazón. Es una web muy visual, pues la fotografía y la ilustración son dos de mis grandes amores.
¿Dónde se puede adquirir tu obra?
“La aldea” está publicada bajo el sello de la editorial canaria Siete Islas. Se puede adquirir en su plataforma web www.editorialsieteislas.com o, de manera más tradicional, en tu librería de confianza.
Imagino que como mente inquieta que eres ya estás pensando en el próximo ¿Me equivoco?
Sí, ya llevo tiempo documentándome para un nuevo proyecto. Pero todo a su tiempo.
Un deseo de cara al futuro más inmediato
Alguien a quien quiero muchísimo está sufriendo “un fuerte temblor, un terremoto”. Mi único deseo ahora es su pronta recuperación.
