Sin embargo, también existe la otra cara de la moneda: la de aquellos que cogen una caña de pescar y además de no respetar el medio ambiente tampoco las especies. Un descontrol del que los deportistas de pesca se quejan, y por ello, Juan Luis Flores Reina pescador deportivo se ha puesto en contacto con advaldepeñas para hablarnos de todo ello y con el propósito de concienciar.
Juan Luis es un pescador deportivo que lleva tan solo dos años pescando más profesionalmente, pero conoce las normas de este deporte a la perfección y, como sus compañeros, cumple la ley a rajatabla. Tiene 27 años, es natural de Almadén aunque ha vivido en Valdepeñas, él tiene licencia de pesca en Castilla-La Mancha, Andalucía y Extremadura. Lo que para él comenzó como algo “nuevo que probar y nada serio” hoy se ha convertido en su deporte y hobbie por excelencia.
“Siempre me ha gustado la pesca, al principio comienzas por lo barato comprando una caña mala en cualquier lado, pero vi que con ello no pescaba nada y lo dejé un tiempo, no tenía mucha suerte ni entendía mucho. Eso sí, desde el principio siempre he estado concienciado por devolver los peces a su sitio y dejar todo limpio”, explica Juan Luis, quién también cuenta que después gracias a sus amigos y compañeros de pesca fue entendiendo más y aprendiendo cosas nuevas, se compró un carrete, una embarcación y así se adentró en este mundillo de forma más seria.
En la pesca que él realiza, desde embarcación, se pescan especies como el black bass y el lucio, que luego devuelve a su hábitat.
Pero este mundo también tienes sus cosas buenas y malas, tal y como explica Juan Luis: “Las malas son que cuanto más legal es uno y cuanto mejor queremos hacer las cosas, peor. Y me explico, yo para pescar en Andalucía tengo que hacer un curso lectivo de 20 horas y me cuesta 70 euros, también tenemos que tener un seguro de responsabilidad a terceros, por lo que yo pueda hacer a alguien mientras pesco. En cambio, hay quienes van a pescar sin licencia, no respetan ni normas, ni leyes, ni especies y ni el medio ambiente que es lo que más me molesta, dejan todo sucio de papeles, latas, cristales e incluso restos de peces ya que los limpian en la orilla del pantano para no manchar en sus casas, dejando un foco de infección donde ya no puedes ni ir”.
Dice que un día se fue, como una de muchas tardes, al pantano de la Cabezuela, aquí en Valdepeñas, y se encontró "con toda la orilla llena de restos de peces, de gente que anteriormente había estado", guardó las cañas en el coche y se puso a limpiar todo lo que habían tirado los demás.
Este pescador habla de concienciación a la hora de cuidar los pantanos, de respetar las especies y sus tallas y a los demás pescadores: “Lo que se hace en comunidades como Castilla-La Mancha o Extremadura es pagar unos 7 u 8 euros, esto conlleva a que cualquier persona puede pescar sin saber realmente si está haciendo las cosas bien o mal". Cuenta que “en Andalucía se imparte un curso y opino que si fuera obligatorio en toda España la gente estaría más concienciada de muchas cosas que hacen sin saber si está bien o mal, y otras que son de lógica y sí se sabe que está mal, como el caso de la basura”. En este sentido, explica que al pescador deportivo no le importa pagar el curso puesto que “sabe que si todo el mundo lo tuviera no ocurriría lo que pasa en Extremadura y Castilla-La Mancha”.
El pescador deportivo que normalmente tiene sus licencias y todo en regla, según Juan Luis “es el que respeta el medio ambiente, no el dominguero que paga 7 u 8 euros, no sabe ni la ley ni la cumple y deja el pantano lleno de suciedad”
Cuenta que ellos utilizan señuelos de silicona o artificiales, pero que hay gente que compra peces pequeños en los acuarios para usarlos como cebo (esto lógicamente esta prohibido): “Eso ocurre aquí en Valdepeñas en el pantano de la Cabezuela, no cumplen la ley y encima pescan desde el puente, algo que está totalmente prohibido. En cambio nosotros tenemos que pescar en zonas que nos indican, no te puedes salir de ahí porque si te cogen la matrícula de la embarcación fuera de la zona te multan. Y cuando ves esto te preguntas ¿Y yo estoy pagando licencias, cursos, permisos de navegación, seguros, cumpliendo con todo y cuidando el medio ambiente para luego llegar aquí y encontrarme con esto?, y estos que vienen aquí de forma ilegal no les dicen nada”, añade.
Nos cuenta que lo que piden es que “la ley sea igual para todos y que se cumpla, que haya más vigilancia para estos pescadores que hacen lo que quieren y no respetan nada, ni las especies ni el medio ambiente. Se sabe quiénes son, pero no se hace nada. ¿Qué estamos creando?, un vertedero, porque yo he visto hasta una televisión vieja en la orilla de pantanos”.
Juan Luis espera que la gente “se conciencie poco a poco de cuidar el medio ambiente en general, ya que para mí estar en el pantano viendo un bonito atardecer escuchando los pájaros cantar es algo realmente maravilloso que la naturaleza nos regala, que menos que cuidarla como se merece”.
