Este proyecto consiste en un licor con sabor a lavanda, pero dulce. Se decidieron por este producto porque consideran que la lavanda está presente en muchos negocios, como puede ser: alimentación, cosmética, medicinal, perfumería o incluso farmacéutica, pero que no se encuentra en el ámbito de las bebidas alcohólicas: “La lavanda no tiene explotación y por eso nos hemos decidido por este proyecto. Además de ser innovador y novedoso en el mercado”, explica María Lourdes Carro, una de las alumnas.
Este producto irá dirigido al sector hostelero principalmente y luego a la venta al por menor a quienes lo soliciten y personas mayores de edad.
Este grupo pide vuestra colaboración ya que necesitan 1.500 encuestas para su trabajo del Instituto. Entrad en este enlace y rellenar la encuesta, es muy sencillo:
