De esta manera, se ha hecho una cata con cinco rosados de Valdepeñas, de los que Rodríguez ha realizado una explicación sobre su elaboración, su tipología según la variedad, y las propiedades organolépticas que presentan.
El sumiller ha señalado que los rosados son vinos que “afortunadamente” van cogiendo una cuota dentro del mercado. “El rosado es un vino fresco, afrutado, y la idea es darlos a conocer y que se rompan los estigmas del pasado de que los rosados eran vinos que se hacían con vinos que no valían, porque es todo lo contrario”, ha explicado.
Esta cata es la segunda que se realiza dentro de unas jornadas promovidas desde la Fundación del Museo del Vino. En el mes de abril tuvo lugar la primera sobre los vinos blancos y queda pendiente de realizar una en junio, dedicada a los vinos tintos.