Con los tiempos que corren ¡eso es un lujo señores!.Que alguien como yo, pueda expresar libremente lo que piensa o siente, sin ser crucificada. Quizás en ese aspecto me siento libre y doy gracias a todos ustedes por hacer posible que yo este contando cien.
Después de ese maravilloso café con Lola, me apetecía contar como un grupo de personas o vidas, contaban una historia a lo más estiló mujeres desesperadas. Anécdotas, líos, maridos, petardos, si mucho petardeo. Creo que no hubiese llegado a los cien. (Risas).
Entonces como tengo la oportunidad de expresarme libremente, decidí desnudar mi alma y cada semana, contar aquello que se hace desde el corazón .
Hecho de menos las peleas con paco y las alocadas historias de mis amigas, sin dejar atrás a mis ninis. También las charlas y los consejos de mi madre en la cocina, las visitas a mi querido pueblo, sus morcillas y chorizos, al mecánico de la esquina, fiestas populares y el camino al Rocio, las uvas enmoñadas en la puerta del Sol, los photocall de las más estiradas y la ordinariez de la princesa del pueblo, como dice una amiga mía, que no le gustaba nada: "Tiene su gracia".
Vivida, soñada, deseada, dejada de la mano de Dios. Pero comprometida y sensibilizada con lo que le rodea, y deseando tener cada día un mundo mejor.
Según María, fiel seguidora, ¡que me quiten lo bailado!, y cierto es. Lo que pasa que me gustaría seguir danzando. Y eso será posible si me dejáis un ratito más contar historias de un alma en paz pero sin descanso y un poco desesperada.
¿Quien no dijo que la media tarde no era bonita?, pues en mi mitad del camino, a punto de pasar por los sofocos y el corte de digestión, me siento viva y con ganas de seguir caminando en una sola dirección, contar, para hacer reír y pensar. También para entretener o aburrir, pero siempre dando gracias, por hacer posible, que está humilde servidora, con la raíz de tres meses, siga entreteniendo al personal.
Gracias queridos lectores y lectoras.
Y para aquellos que no creen en mi gracias, pues con ello aprendo, y los retos me gustan.
KUKA
Capítulo C. Ya son Cien
Fíjate que a lo tonto se cumplen dos años y cien capítulos, donde los que, con más o menos acierto, esta servidora y amante de una buena taza de te, ha contado sus historias y en definitiva, esta desesperada escritora, con más o menos acierto, ha hecho lo que le ha dado la gana.
Kuka
6 de julio de 2014, 12:48