sábado. 20.04.2024

La espalda es una de las zonas más olvidadas de la rutina corporal. La sequedad, las impurezas y la grasa hacen mella en su belleza. Por eso, lo mejor es exfoliarla una vez a la semana en el momento de la ducha utilizando una banda de crin. También es importante hidratarla a diario para mantener su elasticidad y firmeza. Además, una mascarilla de arcilla verde cada diez días previene la aparición de granitos.

Otra de las zonas más delicadas de nuestra anatomía es el escote. En verano, el sol es su gran enemigo. Por eso, debemos mimar esta zona aplicando sérums e hidratantes, que serán las mismas que utilizamos en el rostro, por la mañana y por la noche. También es bueno utilizar cosméticos con vitamina C porque ayudan a recuperar la piel dañada por el sol. Y al igual que ocurre con la espalda, hay que exfoliar una vez por semana para mantener la zona libre de impurezas. Y si tenemos granitos, lo mejor será una mascarilla purificante.

En cuanto a las piernas, la grasa localizada, la flacidez, la piel áspera y el tono apagado son sus grandes problemas estéticos. Pero para lograr unas piernas esbeltas, tonificadas, con buen color y tacto de terciopelo, hay que empezar por la alimentación. Y es que, si existe falta de tono muscular hay que incluir proteínas en la dieta y, si se retienen líquidos, hay que evitar la sal. También es importante ayudarnos de ejercicio físico, como los steps y la elíptica. Un buen anticelulítico, hidratación y una correcta depilación harán el resto. Y, si queremos algo de color en invierno, lo mejor son los autobronceadores.

Por otro lado, la flacidez y los adipocitos de grasa son los grandes enemigos de los brazos. Por ello, es importante fortalecerlos con algo de ejercicio, con pesas ligeras para definirlos sin aportar volumen. La exfoliación en los codos es primordial para lucir la piel suave y sin granitos y, para finalizar, aconsejamos mezclar una hidratante con crema autobronceadora. El resultado será espectacular.

Piel lista para brillar en la noche de Fin de Año con unos cuidados básicos