La vuelta al cole desencadena en los niños síntomas característicos del síndrome postvacacional. Por lo que, no es raro, que la adaptación al nuevo curso dé lugar a que en ocasiones los niños muestren tristeza, ansiedad, fatiga, dificultades para concentrarse en la realización de las tareas, etc.
Para abordar el nuevo curso de manera productiva y efectiva, es fundamental la creación de unos habitos y rutinas adecuados.
Un hábito es una conducta o comportamiento mecanizado tras un proceso de aprendizaje cotidiano o habitual, que actúa de forma autónoma y voluntaria y debido a esa rutina, las acciones cotidianas de gran significado para el niño marcan sus ritmos y tiempos.
Toda rutina está marcada por unos ritmos, los ritmos biológicos proporcionan los primeros patrones constantes del niño. Los ritmos ambientales (hábitos) permiten al niño integrar rutinas como dormir, despertar, bañarse, alimentarse, jugar y auto-cuidarse.
Con el tiempo, el niño tiene una capacidad cada vez mayor de organizar los comportamientos para lograr tareas y rutinas de los cuidados personales. Más aún, los niños descubren que la repetición es una fuente de seguridad, organización y comodidad. Muchos hábitos, los cuáles se convertirán en recursos durante toda la vida, se adquieren durante la infancia.
La principal influencia sobre los hábitos es la rutina familiar: el niño es afectado por cada nuevo cambio en sus ocupaciones, en este caso el comienzo de la escuela.
¿Cuáles son los beneficios de los buenos hábitos de estudio y las habilidades organizativas?
Desarrollar buenos hábitos de estudio y habilidades organizativas pueden ayudar a la mejora escolar del niño. Se encontrarán ante un trabajo más eficientemente y experimentaran menos estrés en el proceso de la vuelta al cole.
Hasta los pequeños cambios pueden hacer una tremenda diferencia y, con el tiempo, unos adecuados hábitos y rutinas, no solamente cambiarán su acercamiento hacia el estudio y la organización sino que se verá reflejado en el trabajo general de clase.
Tener hábitos de estudio que sean efectivos crea un ambiente académico más eficiente. Además, desarrollando un adecuado plan de estudios podemos hacer que la vida académica del niño sea mucho más placentera.
Una correcta estructuración de hábitos y rutinas desde la niñez permite al niño desarrollar una mayor organización para cumplir con las altas exigencias académicas que requiere el nuevo curso.
Los padres podemos ayudar a que nuestros hijos consigan adaptarse a los nuevos hábitos,creando con los niños horarios realistas que se cumplan con el esfuerzo y colaboración de todos los miembros de la familia.
Para cualquier duda de cara a la adecuada creación de hábitos y rutinas para el próximo curso estaremos encantados de atenderle en EDUCA-TE Valdepeñas. 684235075.
