viernes. 26.04.2024

Ahora resulta que la Guerra de Sucesión, felizmente acabada con la capitulación de Barcelona el 11 de septiembre de 1714, en manos de Felipe IV, se quiere manipular ocultando que el verdadero objetivo de esa triste contienda civil , era el enfrentamiento entre las potencias impulsoras de la entrada como rey del archiduque Carlos de Austria – dando continuidad al la monarquía española – y los que preferían a Felipe de Anjou ( borbones ), con la implicación por tanto de austriacos, ingleses y franceses, con una fatal consecuencia cifrada en torno al millón de muertos por la guerra.

Cataluña, por tanto no cayó, por ninguna guerra de independencia de Cataluña, sino por el enfrentamiento de dos dinastías, que llegaron a producir un riesgo secesionista en Aragón y Castilla.

El “héroe” catalán Rafael de Casanova, combatió en defensa del Austria y nunca en defensa de Cataluña.

Como una “cortina de humo” para aportar miedo y patriotería barata, parece que se está utilizando “el caso catalán” ante una  Constitución que deja muy clara la imposibilidad de “consultas” unilaterales...

Como tantos españoles, siempre he amado a Cataluña, incluso elegida  para un post grado que realicé en su Universidad  Politécnica  y desde luego jamas sentí ninguna exclusión por ser castellano.

Habrá casos que se sientan agredidos, - quiero creer que son fruto de animadversiones – pero hay muchos Castellanos-Manchegos residiendo en Cataluña, que se sienten catalanes y por tanto españoles.

Espero que 2014 solucione definitivamente tanta incomprensión e intolerancia, volviendo a su cauce la necesaria convivencia en paz de todos.”

 

Cataluña y la Guerra de Sucesión