lunes. 06.05.2024
OPINIóN

Don Quijote juega al escondite (7ª parte)

Pero al final después de tanto jaleo de personajes, no hemos dicho la relación histórica de San Ambrosio con su contemporáneo San Jerónimo, (Orden titular del Monasterio del Escorial) y traductor de la Biblia al latín, la Vulgata, relacionado con las viudas romanas del siglo IV, entre las que se encontraba Marcela. Es representado junto a un león con la pata atravesada por una espina, y sustituyó a San Ambrosio como secretario del Papa.

yangueses-y-don-quijote-en-la-ilustracion-espanola (Copiar)

Y ya está bien de Marcela, ahora pasamos al capítulo XV, recordado por el de los Yangüeses. Supongo que después de la persecución de Don Quijote y Sancho de Marcela por el bosque al final del capítulo anterior y no encontrarla durante mas de dos horas, es porque que esta ascendió al cielo y Don Quijote y Sancho quedaron en el Purgatorio, que estaba de moda tras el Concilio de Trento (llamado el divino Mantuano en el capítulo anterior), ya que se celebró en la ciudad italiana de Mantua.

Puesto que se trata de un asunto muy comprometido el que aquí se oculta, Cervantes lo pone en boca de Cyde Hamete. Don Quijote y Sancho aparecen en un prado, donde Rocinante provoca a unas yeguas (que ya dije el significado que le doy), y finalmente don Quijote arremete contra los veinte arrieros que les dan una paliza por la espalda. Es constante la mención de la espalda, estacas, dar, tomar, dar saco, voz afeminada, sentirse avergonzados, etc. Para mi no hay duda de que Cervantes nos está recordando a Sodoma y Gomorra (Corrupción de Sodoma, Génesis-19)

Se trata de una sátira, en la que destaca el sentido doble de los elementos fálicos, donde Cervantes hace escarnio de Felipe II.

Entiendo a nuestros dos protagonistas, como los dos ángeles que llegaron a Sodoma, Don quijote y Sancho se encuentran en el purgatorio con gentes que están depurando sus pecados. Sancho pierde la vista, como son cegados en la Biblia, se levanta con las piernas arqueadas, Don quijote va atravesado, son constantes descripciones con segundas intenciones, de lo contrario, el capítulo no tiene mayor sustancia en lo que a la vista se lee. En el capítulo siguiente, entrarán avergonzados y disimulando en la venta.

En La Mancha existió el camino o ruta de los yangüeses, que tuvieron privilegio de Felipe II, para no pagar el portazgo. Pero ¿realmente Cervantes describe la tierra manchega?. Pues no mucho en mi opinión, ya que puede ser cualquier lugar del mundo, salvo que le aplica algunos nombres de lugares de paso que por su actividad profesional, sin duda debía conocer.

No resulta fácil decir esto de personas y personajes de tan alta alcurnia pero la ironía de Cervantes es infinita y cuenta como a Don Quijote y a Sancho les dan por el saco . Ya nos avisó en el capítulo anterior: “con los árboles y con las aguas, comunico mis pensamientos”.

El escudo de Yanguas representa una puerta (exención de pagar el impuesto de portazgo que tenían sus arrieros desde el siglo XIII) y Cervantes lo relaciona al final del capítulo con la ciudad de las 100 puertas, Tebas. Para hacer mas énfasis, menciona a Sileno que es un sátiro griego, borracho, que participaba en cuantas orgías podía y finaliza el capítulo de manera que Don Quijote se compara a sí mismo con Sileno subido en el burro.

Además, se incluye en la burla a Amadís de Gaula y al caballero del Febo de los que nos dan a entender que pasaron por el mismo trance, apostillando que “le echaron una destas que llaman melecina”, que no es otra cosa que un enema. No deja de ser un capítulo divertido, pero vienen los siguientes con la misma ironía.

Don Quijote juega al escondite (7ª parte)