viernes. 29.03.2024

Cuánta razón tenía y cuantas veces lo comento con mis amigos y es que cuando uno lee en la prensa algunas noticias, llega a perder el sueño, de la rabia y la impotencia de ver como la gente sin escrúpulos, sin principios y sin la más pequeña porción de moralidad y seriedad, ocupa cargos de poder en este País.

Estos días nos desayunamos con las noticias de Luis Bárcenas, de los sobresueldos, de la contabilidad en “B “que salpica a la cúpula del partido de gobierno, de la ocultación de cuentas suizas, de las fincas en Argentina y de lo bien que ha venido una oportuna amnistía fiscal que, hasta el propio ministerio de hacienda ha negado que el SR. Bárcenas se haya beneficiado de ella, cuando este hecho ha sido afirmado rotundamente por el propio abogado de Luis Bárcenas.

Mañana me saltará, alguno de estos “ servidores públicos “ que han sido elegidos democráticamente, con algún nuevo recorte que venga bien para su juego de cifras macroeconómicas, argumentando que es necesario para reducir la prima de riesgos y bajar la carga de la financiación,  sea cual sea el colectivo a recortar o, el pueblo a dejar sin servicios médicos.

El asunto es que, el capital extranjero, observa como en otros países de nuestro entorno, los gobernantes tienen eso que se llama “dignidad “y cuando niegan que haga falta una medida política, como subidas de impuestos o recortes en sanidad o en educación o en rescate de la banca, etcétera y posteriormente han de aplicarlas, por dignidad y respeto a su electorado, se van a su casa.

También ven los inversores extranjeros que, cuando un gobernante de un país de nuestro entorno está manchado de corrupción, abandona su cargo por respeto a su electorado y por dignidad y se va a su casa, pero esto no lo copian los nuestros, solo imitan de Europa lo que les conviene.

Así mismo, estos inversores extranjeros, ven que en la España actual, los políticos, pueden mentir las veces que quieran al electorado, que están salpicados de corrupción, que cada día salta uno nuevo a las noticias y claro, ante un país con estos dirigentes, quien nos presta un euro.

Ya podemos hacer las reformas laborales que queramos, los recortes que queramos, pero la prima de riesgo la sube la irresponsabilidad, la falta de vergüenza,  moralidad, seriedad e integridad  de estos políticos que nos gobiernan, porque la prensa extranjera también lo cuenta.

La Mafia Genovesa