Así el pasado viernes, el portavoz del Grupo de la Izquierda Plural, Cayo Lara, señalaba como, según datos del propio sector, la cosecha del año pasado superaba en Castilla La Mancha los 32,5 millones de hectólitros que junto a los 8 de existencias está provocando una crisis en venta del vino a granel, que hacen que estén llenos gran parte de los depósitos existentes. Estimándose para este fin de campaña unos 17 millones de hectolitros (entre vino y mosto), con lo que si se cumplen los pronósticos de una nueva cosecha por encima de los 23,5 millones de hectolitros, nos estaríamos enfrentando a una nueva “vendimia problemática”, por los problemas que pudieran surgir con la recepción de la uva, precio de la misma, almacenamiento, venta y la complicación añadida que cada vez hay más países productores y más competitivos en el mercado global, unido todo a la permisividad de la Comisión Europea con la “chaptalización”, práctica muy desarrollada en los países del norte de Europa.
En este sentido, desde IU creen urgente y necesario que los Gobiernos Central y Autonómico resuelvan cuanto antes estos problemas y protejan el empleo, las rentas de los agricultores y los salarios de los trabajadores vitivinícolas. A la vez que plantea una destilación extraordinaria para paliar los efectos de esta crisis. Y consideran oportuno que el Ayuntamiento de Valdepeñas como municipio muy afectado tome alguna iniciativa institucional y también ciudadana para alertar del problema económico y social que se avecina. Empezando a debatir con los sectores más directamente implicados, la propuesta de alternativas o la reserva de recursos para paliar los efectos negativos que pudieran derivarse para la población.