viernes. 19.04.2024

Este año se han implicado los ocho centros de Infantil y Primaria de la ciudad, que en las últimas semanas han multiplicado los ensayos para escenificar los cuadros elegidos. Hasta 23 preparadoras se han encargado de organizar y dirigir el trabajo con los colegiales. Detrás, maestras, madres y abuelas, han dedicado innumerables horas con la música, los bailes, y por supuesto, la aguja y el hilo para ultimar el vestuario.

Paqui y Pilar son las coordinadoras y no ocultan su satisfacción una vez que los niños saltan a escena. “Merece la pena porque nos gusta la zarzuela y por eso lo hacemos”. Pero detrás hay meses de dedicación. Primero con las reuniones previas, que este año han logrado comprometer a todos los colegios solaneros. Hacía mucho que esto no sucedía. Allí se discute sobre las zarzuelas a representar. “Nosotras proponemos ideas y después los colegios deciden lo que quieren escenificar”.

Aunque los preparativos se inician antes de acabar el curso, es en septiembre cuando se aceleran los ensayos y se ultiman las coreografías para las actuaciones. Las preparadoras se afanan en coordinar los cuadros líricos y Marieli Blanco, esa mujer-orquesta, es quien modula a solistas y coros para mejorar la puesta en escena desde el punto de vista musical. “A Marieli hay que hacerla solanera” –bromeaban las coordinadoras-.

El CEIP Sagrado Corazón puso en escena Los botijeros y el canto a Murcia, ambos de La parranda. Catorce niños y niñas han ensayado a las órdenes de Petra Martín-Albo, María Sevilla y Manoli Moreno-Arrones. El CEIP El Humilladero salió a escena con 17 colegiales, dirigidos por María Dolores Mateos y Carmen Arroyo. Interpretaron fragmentos de El barberillo de Lavapiés, entre ellos la canción de La Paloma, la seguidilla de Lamparilla y El gremio de las costureras. 

Veintitrés alumnos escenificaron momentos de la zarzuela El rey que rabió, en concreto los coros de Los Pajes y Los Doctores y la mazurca de los Segadores. Elena Fernández, Petri Serrano y Baldo de Lara han sido sus preparadoras. El CEIP Romero Peña desplegó a 21 colegiales para escenificar los cosacos de Kazán y Rusa Rusita, de Katiuska, bajo la dirección de María Jesús Naranjo, Miguela López y Mari Ángeles Romero de Ávila. El CEIP Federico Romero movilizó a 29 colegiales para llevar a la escena Agua, azucarillos y aguardiente, por ejemplo el coro de las Niñeras y el dúo de Pepa y Manuela.

El CEIP El Santo representó varios cuadros de La revoltosa, entre ellos el famoso dúo de Felipe y Mari Pepa, con 13 escolares y la supervisión de Mónica Cortés, Joaqui Bueno y Luis López. El CEIP Javier Paulino movió a 26 alumnos para bailar la célebre mazurca de las Sombrillas, de Luisa Fernanda, ensayada con Cati Santos y Lola Romero.

Y el colegio concertado San Luis Gonzaga reunió a 29 chiquillos para poner sobre las tablas La rosa del azafrán, en concreto el preludio, la romanza de El sembrador y el coro de Las espigadoras. Han sido preparados por Juani López-Villanueva y Gabina María del Olmo.

El auditorio ‘Tomás Barrera’ se llenó a rebosar. Los familiares de los niños acudieron en masa para disfrutar de la espontaneidad, viveza y animación que siempre provocan los niños sobre el escenario. 

Alrededor de 170 niños y niñas participan este año en las Jornadas Escolares de Zarzuela