viernes. 26.04.2024

El alumbrado especial de Navidad en La Solana ya luce a plenitud. Las noches en el caso histórico de la ciudad tienen otro color desde el jueves día 14 de diciembre, cuando los técnicos municipales encendieron la totalidad de la iluminación instalada. Dos semanas antes, el 1 de diciembre, se había encendido una parte a fin de ambientar la semana del Festival de Cine y Vino.

De acuerdo con los nuevos tiempos, el alumbrado ha cambiado. Es el tercer año que se contrata a una empresa de Cuenca para ornamentar algunas calles y también la Plaza Mayor. Lo hace mediante luces con tecnología lead, a base de cortinas luminosas que recrean diferentes motivos. El electricista-jefe del Ayuntamiento de La Solana, José Ángel Díaz-Mayordomo, defiende este tipo de iluminación por razones de operatividad y coste. “Son más caras de instalar pero consumen muchísimo menos; pueden estar un mes encendidas y compensa”. Valga como ejemplo que, sólo en la calle Carrera, los arcos de siempre consumen 50 kilovatios, mientras todo lo demás de luz lead apenas consume 1.000 vatios.

El técnico reconoce que aún mantienen algunos de los arcos tradicionales en determinadas calles, con las típicas microlámparas. “Nos da un poco de pena no usarlas”, admite, aunque también es consciente de que comienzan a estar en desuso. Consumen mucho más, son más complicadas de montar y, sobre todo, de modificar de un año para otro. Con un problema añadido, las dificultades para encontrar bombillas de recambio cuando se van fundiendo. “A medio plazo, la iluminación tradicional tiende a desaparecer”. 

Una de las novedades radica en la Plaza Mayor, con nuevas cortinas luminosas adornando las fachadas sobre los soportales circundantes, aunque el gran reclamo es el árbol navideño instalado en el centro. Es el cuarto año que se monta este árbol, aunque el primero lo hizo el propio Ayuntamiento de una forma muy básica. Por tanto, es el tercero que lo trae esta empresa conquense, con un colorido distinto al de los dos años precedentes.

A pesar de la nostalgia que pueda provocar la vieja iluminación, José Ángel Díaz-Mayordomo reconoce que la tecnología lead supone un antes y un después, que ya se está viendo en el alumbrado público ordinario. Se han cambiado muchas farolas, por ejemplo en la zona centro y áreas exteriores como la Avenida de la Constitución o el nuevo ensanche de la Avenida de la Romería. “Es un cambio radical, por calidad de luz”. Y eso que las farolas de vapor sodio han dado un gran resultado. “Muchas no las hemos cambiado en 20 años, pero se supone que los puntos lead duran 50.000 horas y no hay color con respecto a la otra”. Por cierto, avanzó que pronto se cambiarán un centenar de puntos más y que está previsto seguir avanzando en esta nueva tecnología de iluminación.

El alumbrado especial de Navidad ya luce a plenitud en La Solana