En el acto, al que han asistido numerosos amigos del pintor, además de aficionados al arte de la localidad y de la provincia, la Alcaldesa ha destacado “la maestría de García Sevilla en el tratamiento de la luz, así como los efectos que ejerce sobre la naturaleza, el dibujo, la composición, la técnica o los procedimientos pictóricos”.
La estampa representa un valle plagado de olivos en la Sierra de Cazorla, Segura y las Villas, con el pueblo de La Iruela al fondo. Aprovechando la luz de la mañana, el autor pretende captar un momento concreto de luz, así como servirse de la perspectiva y fuga de los árboles del primer término para crear profundidad a base de texturas, dibujo y gamas cromáticas. “Lo que pretendo es incorporar nuevos colores buscando la armonía del conjunto. Procuro investigar mucho… aportar cosas nuevas a cada cuadro”, ha manifestado el autor.
Fermín García Sevilla es un pintor con una dilatada trayectoria pintando del natural. Investigador incansable obsesionado por el dibujo, la composición y la luz. Preocupado por la técnica, su búsqueda constante de los efectos lumínicos ha dado como fruto una obra honesta, limpia, sin artificios pictóricos, fiel al modelo representado.
Sus trabajos se hallan en numerosos museos, instituciones y colecciones privadas del mundo. Con más de un centenar de premios nacionales, entre los que destacan el López Villaseñor de Ciudad Real, Winthertur de Burgos o Endesa de la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría en Sevilla, ha expuesto en importantes Galerías como Sokoa o Herráiz en Madrid, o Comas, en Barcelona.
Actualmente regenta en su pueblo, Tomelloso, su Estudio-Taller de Artes Plásticas, Técnicas y Procedimientos Pictóricos impartiendo clases de pintura y dibujo.
