El cuadro flamenco Savia Nueva pretendió fundir las tres formas de ver y sentir el flamenco a través de la música, el cante y el baile, lo que consiguió sobradamente con la actuación de los bailaores, Jesael e Inmaculada Pacheco, la cantaora Gemma García, Antonio el de la Alfonsa a la guitarra e Imanol García al violín.
El Auditorio de la Encarnación se convirtió en un tablao flamenco joven y dinámico con una actuación variada y de calidad donde el público disfrutó de una grata velada de flamenco.