Un mercado de trabajo en el que se sigue destruyendo empleo -en el último mes 95 nuevos desempleados-, pero “lo más grave es que los que están en el paro se cronifican y encima no cobran ya ningún tipo de ayuda social durante meses y meses”.
Y es que, tan solo son beneficiaros de algún tipo de cobertura social 33.410 personas, cifra que supone una caída de 4.200 beneficiaros respecto al mismo mes del año anterior. Hablamos de personas inscritas en las oficinas de desempleo sin posibilidad de encontrar un trabajo y que tampoco tienen ninguna cobertura social. De hecho, tan solo el 47% de parados y paradas de la provincia ciudadrealeña reciben algún tipo de prestación por desempleo”.
Un goteo continuo que no cesa en este apartado y que Del Valle observa con la preocupación lógica que conlleva que se suma a otro parámetro igualmente alarmante, como es la caída de afiliados a la Seguridad Social, 21.000 menos en lo que va de legislatura y que se traduce en una pérdida del 14% de los empleos en la provincia de Ciudad Real desde que María Dolores de Cospedal y el PP asumieron el Gobierno de Castilla-La Mancha.
Tras el último incremento de paro registrado en marzo, Ciudad Real acumula un total de 70.870 personas inscritas en los servicios públicos de empleo. “Estamos hablando ya de una tasa de paro del 32% que fluctúa hasta el 33% de un mes a otro, pero que no conseguimos bajar de esa barrera que está muy por encima de la media nacional”.
Respecto a la contratación, ésta cayó en 56 personas en marzo respecto al mes anterior, dato malo por sí mismo, aunque el dirigente socialista ha puesto la lupa en el hecho de que los escasos contratos que se formalizan son el 94% de carácter temporal y generalmente en condiciones de precariedad que contribuyen aún más en ese deterioro general del mercado laboral citado con anterioridad.
Con estas cifras, y sobre todo con esa tendencia negativa constante, Del Valle ha reconocido que la valoración no puede ser positiva de modo alguno, por lo que ha vuelto a reivindicar al Gobierno de Cospedal la puesta en marcha de medidas de reactivación y promoción industrial y políticas activas de empleo que den un respiro a los cientos de miles de castellano-manchegos que están en una situación familiar límite porque quieren trabajar y no pueden.
Por último, y como consecuencia directa de esa situación de angustia y de falta absoluta de oportunidades laborales y expectativas de futuro, Eduardo del Valle ha recordado que más de 4.000 ciudadanos se han marchado de la provincia ciudadrealeña a otras comunidades autónomas y al extranjero.
