Y en ellos se han detectado, aparte de problemas comunes, dificultades puntuales para cada uno de los sectores, de ahí que García haya adelantado que una de las iniciativas que pretenden llevarse a cabo pase por aportar soluciones al comercio directamente con los alcaldes en aquellos municipios en los que gobierna el PSOE.
Respaldo en la medida de lo posible “para fomentar este tipo de empresas que están muy abandonadas por parte de la administración central y regional”, ha declarado Alipio García, pese a que ha recordado que son los mayores generadores de empleo y negocio en una provincia de las características de Ciudad Real y “a día de hoy con una de las cifras más catastróficas de desempleo de toda España y, por descontado, de Castilla-La Mancha”.
Además, el responsable de Innovación y Emprendedores del PSOE ciudadrealeño ha justificado la oposición de los socialistas a la nueva ley del comercio de Castilla-La Mancha. “Lo que ha hecho el Gobierno de Dolores de Cospedal es asestar un varapalo muy grande y rematar a este sector, puesto que este cambio supone un gran apoyo a las grandes superficies y empresas”.
Para García, “de nada sirve que el Ejecutivo castellano-manchego pretenda camuflar ese perjuicio con medidas como la liberalización de horarios o se pongan medallitas con la licencia exprés para la apertura de establecimientos, que está muy bien, porque en el fondo lo que hace la nueva ley es ahogar aún más a los pequeños comercios”.
Es tan agravante la situación en la provincia de Ciudad Real que el grupo de comercio del PSOE ha exigido a la Junta de Comunidades la urgencia de adoptar iniciativas y un cambio en su estrategia respecto a este sector.
Y es que, “de nada sirve la publicidad masiva y vacía que está realizando el Gobierno de Cospedal para vender las medidas de apoyo a emprendedores”, ha destacado García, al señalar que a la hora de la verdad cuando uno visita asesores o gestorías para tramitar todo ese tipo de subvenciones, a la mayoría, por no decir el 100%, no se pueden acceder porque no cumplen todos los requisitos que piden y porque son medias acordadas con entidades financieras que siguen tratando a estos emprendedores como a cualquier otro ciudadano, es decir, no dan financiación.
Como conclusión, Alipio García ha dicho que la actuación se puede resumir en que “lo que realmente está haciendo el Gobierno de Cospedal es un plan regional de destrucción de lo ya emprendido, que es lamentable, y que por mucha publicidad, sonrisa y foto que quieran hacer, es una realidad”.
