sábado. 27.04.2024

A primera hora de la mañana, partía la expedición desde la zona del parque municipal, comenzando así un itinerario que pasaría por San Carlos del Valle, El Peral y Membrilla antes de regresar a La Solana. Cerca de las dos de la tarde, las motos comenzaron a poblar la Plaza Mayor, convirtiendo el entorno en un improvisado museo de verdaderas joyas del asfalto. 

Este año, como novedad, una decena de tractores antiguos se unió a la última parte del recorrido hasta el final, mostrando así otro tipo de reliquias del mundo agrícola. Según argumentaron los directivos de la Asociación de Motos Clásicas de La Solana, colectivo organizador, los tractoristas solicitaron acompañarles hasta la Plaza Mayor para dar a conocer sus aparatos porque están planteando consolidarse en asociación, si bien le dieron más colorido a la prueba, como también reconocieron. 

Los directivos Juan Palacios y Manuel Moreno, destacaron la buena participación de motos, aunque hubo algunas menos que el año pasado. En este sentido, los directivos indicaron que la bajada de participantes es la tónica de las concentraciones en los últimos tiempos, agradeciendo la asistencia de todos y también la contribución de patrocinadores y ayuntamientos colaboradores. 

La jornada se desarrolló con total normalidad y sin ningún tipo de incidentes, teniendo en cuenta las altas temperaturas que soportaron motos y moteros. 

Los componentes de la Asociación de Motos Clásicas de La Solana finalizaron muy satisfechos tras la prueba, indicando que devolverán visita a muchos de estos participantes en las concentraciones que realicen en sus localidades de origen. Los participantes vinieron procedentes de muchas poblaciones de la provincia de Ciudad Real y de otras ciudades como Albacete, Murcia, Madrid, ó Jaén entre otras. 

 

Las motos clásicas volvieron a rugir por La Solana