Las XII Jornadas Nacionales de Folclore comenzaban con la actuación del grupo anfitrión “Cruz de Santiago”, cuyo repertorio arrancaba con el Baile de las Espadas de Albaladejo, para continuar con Fandango de Infantes, Jota de Alcubillas y Jota de Carrizosa.
Desde Socuéllamos, en Ciudad Real, llegaba la Asociación Folclórico Musical “El Lagar”. Una entidad que es toda una institución y un referente para la vida del pueblo, y es que para esta asociación los trajes, bailes y formas de interpretar no es un añadido, es la vida misma de Socuéllamos. En su repertorio cuenta con seguidillas, jotas, fandangos, rondeñas, malagueñas y otras piezas del folclore popular de Castilla-La Mancha.
Desde Castilla-León llegaba el Grupo de Coros y Danzas “Villa de la Seca”, de La Seca (Valladolid). Su objetivo es dar a conocer en España y en el extranjero la gran variedad de bailes y cantos que componen el folclore castellano, con la ilusión de que la dulzaina y el tamboril no dejen de escucharse.
El broche final lo ponía la Asociación Cultural Folclórica Recreativa “Manuel de Falla”, de Villacañas (Toledo). Un grupo que mantiene vivo el folclore de la localidad compuesto principalmente de jotas, seguidillas, rondeña, fandango y manchegas surgidas al amparo de las fiestas y de las reuniones en torno a la hoguera.
Las Jornadas, organizadas por la Asociación de Folclore y Tradición “Cruz de Santiago” y patrocinado por el Ayuntamiento de Villanueva de los Infantes, ha contado también con la colaboración de diferentes instituciones y empresas cuyo objetivo es fomentar el conocimiento del patrimonio inmaterial que constituye el folclore, más allá de los tópicos y los estereotipos culturales, a través de unas jornadas que no sólo cumplan una función lúdica y recreativa, sino que también sean capaces de devolver a la ciudadanía el interés por la cultura tradicional, relegada a un segundo plano y desnaturalizada en múltiples ocasiones.
