La cita tenía lugar al mediodía, acogiendo la iglesia parroquial a decenas de vecinos, entre ellos diferentes autoridades locales y policías compañeros de Puertollano, Ciudad Real o Almodóvar del Campo o miembros de la Guardia Civil y de Protección Civil, acompañando a los agentes rabaneros.
La alcaldesa Jacinta Monroy quiso transmitir personalmente su enhorabuena, deseando al igual que sus conciudadanos que “sigan con su buen hacer, que repercute en la protección de las personas y los bienes de la localidad”.
La regidora indicó que jornadas de fiesta como ésta tienen que contribuir “a reflexionar acerca del trabajo que estos policías hacen día a día para intentar que todo fluya lo mejor posible y que la seguridad ciudadana esté entre nosotros, de manera que su intervención sea la menor posible como síntoma de que las cosas van bien en Argamasilla de Calatrava”.
Por su parte, Lorenzo Lobato, jefe de la Policía Local, expresó la alegría del cuerpo por haber celebrado la festividad de sus patrones un año más y quiso “dar las gracias a todo el pueblo de Argamasilla de Calatrava por la participación que tiene con nosotros y la colaboración que nos muestran día a día”.
“Siempre nos tienen en cuenta a todos los niveles, no solo en cuanto a seguridad y requerir nuestros servicios, sino también en estos actos que, cuando llegan, se vuelca toda la población hacia nosotros y, por lo tanto, estamos satisfechos y orgullosos de pertenecer al cuerpo de la Policía Local de Argamasilla de Calatrava”, aseveró Lobato.
Según este mando policial, en la población rabanera se está reduciendo la delincuencia, en torno a un 20-25% respecto al año pasado. Una disminución que, como explica, alcanza sobre todo a delitos contra la propiedad y otros menores con cierta violencia como los tirones “que han disminuido bastante”.
Por el contrario, “en asuntos de índole familiar y violencia de género y se está interviniendo más, entendemos que por cuestiones de la crisis económica que los conflictos familiares lo reflejan con más intensidad”, razona el jefe de la Policía Local. Las intervenciones en estas situaciones procurar ser meramente mediadoras, “porque si hacemos lo contrario podríamos generar doble problema, el que ya existía y por añadidura que se derive en un procedimiento judicial”.
