A juicio de UPyD, “la reforma de la Constitución es urgente pero su objetivo no puede ser que haya más desigualdades sino más bienestar para todos. El propósito de una reforma no puede ser tratar de contentar las ansias y deseos infinitos de los nacionalistas vascos o catalanes sino defender el interés general de la ciudadanía y fortalecer el Estado del Bienestar, entre otros”.
Para el delegado de UPyD en Manzanares, Pedro María Castellanos, “hay que reformar la Constitución pero sólo para que recoja las propuestas ciudadanas y resuelva el modelo territorial del Estado con el reparto de competencias y su financiación, mejore la separación de poderes, y asegure el derecho a la participación política, la igualdad jurídica y de oportunidades y las libertades personales”.
Así, Castellanos propone un diseño territorial de tipo federal, descentralizado de forma racional, con las competencias adjudicadas a cada uno de los niveles y reservando las más importantes para el Estado, dotado de mecanismos de cooperación y de lealtad institucional y gestionado con criterios de eficiencia que “permitiría además de una ahorro importante, más eficacia, más control y más justicia”.
“Mientras que la meta de los nacionalistas es modificar la Carta Magna para proteger sus propios intereses, el objetivo de UPyD es mejorar el bienestar de todos, blindar y ampliar derechos y que haya más igualdad y definir un nuevo modelo de Estado sostenible con mejores servicios públicos, más igualdad, más libertad”, asegura.
