Las obras se han prolongado durante más de una semana. Con ellas se da solución a las filtraciones de agua originadas por el aumento del nivel freático. Para ello se levantó en primer lugar el firme de la zona inferior de la calzada, donde el agua mana de forma natural al estar actualmente por debajo del nivel freático. Según los cálculos de la Concejalía de Obras, a diario se achican más de 250.000 litros de agua con las bombas instaladas en este puente.
Con el drenaje realizado, el agua se canaliza ahora mediante varias tuberías que vierten en el tanque de desagüe ubicado en un lateral del paso, justo bajo la zona peatonal del mismo y donde se encuentran las bombas de achique.
La superficie se ha sellado con piedra y hormigón, tras lo que se ha asfaltado la zona afectada y se ha abierto al tráfico de vehículos.