Con mucha causalidad, solo podría ser así si esas 12.000 personas que se han dado de baja en la Seguridad Social se hubieran cambiado de régimen laboral al unísono, porque de lo contrario tiene difícil explicación. Tanta que Dell Valle ha reiterado que “es incomprensible y creemos que es un dato que no tiene que ver con la realidad”.
Sin desmerecer el descenso del número de parados registrados en el pasado mes de octubre (1.028), el dirigente socialista ha lamentado que sigamos en una evolución mala tanto por los 12.000 desempleados más que hay en la provincia ciudadrealeña desde que Cospedal llegó al gobierno de Castilla-La Mancha como por la pérdida de 23.823 cotizantes desde el inicio de la legislatura.
También ha citado Del Valle la caída producida en la contratación, 2.500 contratos menos respecto al mes anterior que representan un 16,5%, una tendencia que se observa también en el acumulado del año, periodo en el que solo el 4,7% de los contratos que se formalizan son indefinidos, lo que significa que casi el 96% restante de contrataciones realizadas a lo largo del 2014 son de carácter temporal, que no hace más que reflejar un predominio total de la temporalidad y la precariedad.
En cuanto al nivel de cobertura de prestaciones por desempleo, Eduardo del Valle ha dado la voz de alarma, ya que este indicador se sitúa en torno al 50% y esto “siempre es una pésima noticia si tenemos en cuenta que los niveles de cobertura oscilaban siempre entre el 70 y el 80%, con lo cual, la realidad actual es que tenemos muchísima más gente en desprotección y desamparo”.
Medidas de supervivencia
En esa línea, se ha mostrado crítico al señalar que “se sigue sin poner en marcha ninguna medida pese a que desde el Partido Socialista ya hemos propuesto miles de veces a lo largo de esta legislatura la necesidad de instrumentos y políticas de apoyo y generación de empleo, aunque sean temporales”.
Y es, ha finalizado diciendo que medidas de ese tipo permitiría a las familias tener una cobertura social mediante una prestación o subsidio por desempleo “para poder mantener un nivel básico de supervivencia, porque la realidad es que estamos dejando tiradas siempre a cerca de 30.000 familias en la provincia sin ningún tipo de ayuda” que tienen que recurrir a las campañas solidarias y a la caridad.
