Por otro lado, el Ejecutivo regional también ha mostrado su disposición de colaborar con el sector de la cuchillería albaceteña para que se incorpore a las Denominaciones de Indicación Geográfica Protegida, para Productos no Agroalimentarios, que ha puesto en marcha la UE.
Entre los sectores artesanales que se quieren adherir a esta IGP Comunitaria, se encuentran además del sector cuchillero de Albacete; el mármol de Macael o la piel de Ubrique, estas últimas con el apoyo de la Junta de Comunidades de Andalucía.
Alianza institucional entre la Junta y APRECU
Estos dos compromisos de colaboración institucional con el sector de la cuchillería, surgieron tras el encuentro mantenido por el delegado de la Junta de Comunidades en la provincia de Albacete, Pedro Antonio Ruiz Santos con la Junta Directiva de APRECU.
Tras la reunión, el delegado de la Junta subrayó que el sector cuchillero “trasciende el ámbito económico para convertirse en un sentimiento”, y mostró su deseo de que la cuchillería albaceteña, pueda seguir siendo en el futuro un sector artesanal para la creación de empleo, como lo ha sido en generaciones anteriores.
Ruiz Santos describió a este sector como “un emblema y un símbolo de la provincia de Albacete” y recalcó que la Junta de Comunidades apoyará en todas sus reivindicaciones a APRECU.
Por su parte, el presidente de APRECU, Juan Andrés Barberó aseguró que esta la Asociación de Cuchillería y Afines cuenta con el apoyo de la Junta en sus reivindicaciones en la protección “de un sector de tradición y raíces en la cultura de la provincia de Albacete”.
Barberó explicó a los medios de comunicación, que hace una década, había cerca de 2.000 empleos directos vinculados a este sector, sin embargo, -remarcó-, actualmente hay 850 empleos, una reducción originada por la crisis económica, por la falta de consumo y por una importación de mercados asiáticos principalmente, que no cumple con la normativa “made in”.
