Un esfuerzo que se verá recompensado a partir de ahora, con la mirada puesta la Ley de Desarrollo Rural Territorial que el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha anunciado recientemente y que será una de las puntas de lanza de esta Consejería.
El consejero ha explicado que, “son los habitantes del territorio, a través de los grupos de desarrollo rural, los que tienen que decidir los proyectos que hay que financiar en sus municipios; tanto en industria artesanal, agro-alimentaria o de turismo rural”. Martínez Arroyo ha reivindicado el papel fundamental que desempeñan los grupos de desarrollo rural, especializados en la aplicación de la metodología, “en la que los propios actores del medio rural son los que deciden las políticas de desarrollo de sus territorios".
En este sentido, el consejero se ha referido a la gestión de los grupos de desarrollo rural en la legislatura anterior, “somos críticos con cómo han funcionado los grupos en los últimos 4 años en Castilla-La Mancha, creemos que no se han hecho las cosas bien, hay que darles mucha más autonomía ya que son ellos los que deben decidir las cosas que hay que hacer”. Es decir, “en este tipo de políticas, de tipo pequeño, que tienen que ver con el desarrollo del territorio como casas rurales o espacios comunes, no se deben decidir desde Toledo”, ha reiterado.
Inminente aprobación del PDR desde Bruselas
Castilla-La Mancha espera la inminente aprobación del nuevo Programa de Desarrollo Rural (PDR) para el período 2014-2020, en los próximos días desde Bruselas que cuenta con un presupuesto de 1.500 millones de euros, gracias al esfuerzo de la Administración regional que compensará el recorte de fondos aportados por el Ministerio de Agricultura.
