El 98% de los pacientes atendidos en el Viña Rock, tanto en el Hospital General de Villarrobledo como en cualquiera de los dos Puntos de Atención a Urgencias Médicas estratégicamente localizados alrededor de la zona de conciertos, fueron inmediatamente dados de alta y tan sólo cuatro personas han necesitado ser hospitalizadas.
El único espectador del Viña Rock que permanece a estas horas en observación médica es una joven que está atravesando un proceso ginecológico. Su estado de salud no reviste gravedad y se espera que en las próximas horas pueda regresar a su domicilio.
La patología traumática ha sido la más atendida. Así, cerca del 76% de los pacientes examinados fueron personas afectadas, sobre todo, por esguinces, contusiones o heridas. El resto de patologías diagnosticadas fueron quemaduras, golpes de calor, intoxicaciones etílicas o por consumo de estupefacientes.
Además de los mencionados puntos de refuerzo médico, la Gerencia de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario (GUETS) y el 112 también han aportado, además de un dispositivo de ambulancias, personal y material sanitario. En ese sentido, hay que recordar que la empresa organizadora ha gestionado, a título particular, los recursos sanitarios dentro de la zona de conciertos, cuyo acceso fue privado y con entrada.
Según la organización, el evento ha recibido un apoyo masivo. Calculan que 200.000 personas han participado en esta XXI edición del festival. El viernes y el sábado fueron los días en los que se registraron más atenciones sanitarias. Así, el viernes se atendió a 403 personas y el sábado a 484. Por el contrario, el jueves tan sólo necesitaron cuidados sanitarios 290 personas y el domingo 192.