viernes. 29.03.2024

LÓPEZ & GALÁN ABOGADOS señala que el aumento del desempleo agudizará la crisis económica. El número de parados registrados en las oficinas de los servicios públicos de empleo se disparó un 8%, en 282.891 desempleados el pasado mes de abril. Estos datos son negativos pues implica su mayor repunte este año de toda la serie histórica, según los informes aportados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social . El volumen total de parados ha alcanzado la cifra de 3.831.000 desempleados, lo que supone 667.600 más que hace un año. Cataluña, Madrid y la Comunidad Valenciana fueron los territorios más golpeados por la crisis. En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, los registros han caído un 4% dejando el número de afiliados en 18.396.000 cotizantes,. LÓPEZ &GALÁN ABOGADOS señala que  la pérdida de afiliados al sistema alcanza los 947.896 ocupados, lo que implica un importante descenso.

Por otro lado, el número de trabajadores afectados por las regulaciones temporales de empleo (ERTE)  ascendía a 3, 3 millones de personas, de los que el 90% lo estarían bajo la fórmula de fuerza mayor. Sin embargo, la cifra de afectados por ERTE facilitada por el Gobierno es inferior a la que han ido facilitando en el último mes los sindicatos, que ascendía a 3,9 millones de personas. En cualquier caso, el gasto en prestaciones del Ministerio de Trabajo se ha multiplicado por tres, hasta 4.512 millones de euros, y ha alcanzado el máximo de la serie histórica, lo que implica un nuevo embate para las arcas públicas muy mermadas por la situación económica generada por la crisis sanitaria. A todo ello, hay que señalar que actualmente 5,2 millones de personas están en nómina para el cobro de prestaciones por desempleo. Desde los organismos oficiales el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) está tramitando  más de 360.000 expedientes diarios, lo que supondrá un aumento del gasto público.

Los ERTE han sido un recurso de urgencia para garantizar la supervivencia de las empresas y de la actividad de los autónomos al tiempo que se sostiene la posibilidad de empleo cuando el estado de alarma haya terminado. Han moderado la destrucción de empleo en cuanto que los trabajadores afectados siguen dados de alta en la Seguridad Social y perciben una prestación. Además, permite sobre todo albergar expectativas de recuperación del empleo cuando se supere la crisis, algo que no en todos caos será posible pues más de tres millones de empleos del comercio minorista, turismo y otros servicios están afectados por el cierre definitivo de la actividad.

Por otra parte, el daño laboral no termina con el registro de los empleos existentes paralizados o destruidos por el cierre de actividad, también hay que valorar los que no se han creado a causa de la parálisis productiva, y que podrían calcularse por encima de 1,5 millones de trabajos no creados. Además, hay que añadir la situación de los parados de larga duración y los de mayor edad  se va a agravar en esta crisis económica .El hundimiento del empleo es el primer factor de la recesión de la economía española en 2020. Su profundidad no puede calcularse hoy con precisión, pero tendrá consecuencias acusadas para el empleo, las empresas y, por supuesto, para la estabilidad financiera.  

Para LÓPEZ & GALÁN ABOGADOS el principal problema de esta crisis reside en el hecho de que se está haciendo un mal enfoque para recuperar el empleo, pues se están destruyendo muchos puestos de trabajo, sin tener en cuenta que la clave para la recuperación económica reside en la protección del tejido empresarial especialmente se deben destinar ayudas a la pequeña y mediana empresa para que se puedan mantener los puestos de trabajo. Por otro lado es importante insistir  que la base del plan para reabrir la economía es el uso de test en las empresas, al efecto de controlar la crisis sanitaria en los factores de producción. Hacer test a todo el mundo y aislar a las personas que son portadoras del virus es la solución provisional que se debe adoptar. Si hacemos esto se podrá controlar la pandemia y restaurar la confianza en la recuperación económica, porque solo aislando la pequeña porción de gente que está infectada podremos volver a la normalidad y evitar rebrotes. Para recuperar la economía, tenemos que asegurarnos de que la gente se sienta segura y con confianza en el puesto de trabajo. Hay que tener un plan económico para gestionar la pandemia que sea creíble y efectivo, no solo medidas puntuales o parches que es lo que ha venido haciendo el Ejecutivo, agravando las consecuencias negativas de esta crisis.

El aumento del desempleo agudiza la crisis económica