Tras la misa oficiada por el Obispo de Ciudad Real, Monseñor Gerardo Melgar y la reelección de Pelayo Dorado como presidente de Manos Unidas a nivel provincial además de la incorporación de nuevos miembros, Juan de Dios Rojo explicó el Documento Base de Manos Unidas para la campaña 2017, que se incluye dentro de la “Campaña Trienal de Manos Unidas contra el hambre 2016-2018”.
Recordemos que el Documento Base de 2016, presentado con el lema “Plántale cara al hambre: SIEMBRA” abordaba el problema del hambre desde distintos aspectos específicos bajo la imagen de la semilla. En este sentido, Rojo, explicó que en esta nueva edición 2017 “se incorporan otros aspectos nucleares del problema del hambre, bajo la idea-fuerza de plantarle cara a esa lacra desde nuestro compromiso con una producción y consumo sostenibles.
Asimismo, tiene dos momentos diferenciados, aunque complementarios: por un lado, su contextualización dentro del Documento de la Campaña Trienal y vinculación con el de 2016, y por otro lado, la presentación de la problemática propia del 2017”.
El Coordinador de Valdepeñas, presentó una justificación del trienio, desde dos puntos de referencia, como son: El problema del hambre y la Recuperación del Impulso fundacional. En el primero de los casos habló de cómo a pesar de producir suficientes alimentos para alimentar a casi el doble de la población mundial actual “todavía sigue habiendo 800 millones de personas que no pueden comer, a las que se niega el derecho fundamental a alimentarse”. En cuanto a la segunda, recordó como Manos Unidas nace como Campaña contra el Hambre, en respuesta al llamamiento que hizo la Unión Mundial de Organizaciones Femeninas Católicas, en 1955 a “Declarar la guerra al Hambre”.
El hambre en el mundo, el compromiso de Manos Unidas de volver a la cuestión del hambre proponiendo una fundamentación a la lucha contra esa lacra, analizando la insostenibilidad del modelo actual, manifestando su compromiso por un modelo global de producción agrícola y consumo sostenibles, la solidaridad, el derecho a la alimentación, el trabajo desde la Fe cristiana, la Doctrina Social de la Iglesia, el bien común, la pérdida y el desperdicio de alimentos y su impacto en el hambre, fueron los temas explicados por el coordinador de Manos Unidas Valdepeñas.
Finalmente, concluyó resumiendo el Documento Base y señalando como a la campaña de 2016 en la que se siembran recursos, capacidades, responsabilidades y solidaridad, en 2017 “tenemos la obligación de plantarle cara al hambre con nuestro compromiso, con una concepción de los alimentos como comida para seres humanos y no como negocio, compromiso con una agricultura sostenible y compromiso con un aprovechamiento integral de la producción, evitando la pérdida y desperdicio de alimentos. Como dice el lema de este año: “El mundo no necesita más comida; necesita más gente comprometida”.
