La cueva, de unos 750 metros cuadrados, aparte de ser una de las más grandes de Valdepeñas también es una de las más antiguas, ya que la bodega data de 1875, aunque con toda probabilidad la cueva es anterior, según ha explicado el concejal de Obras y Urbanismo, Manuel Martínez López-Alcorocho.
Así, la actuación ha consistido fundamentalmente en recuperar paredes y solado, rehabilitar la escalera de subida y bajada y colocar unos paneles de cristal para proteger las incontables botellas de vino que se encontraron apiladas en la cueva. Entre los detalles que aún faltan, está la instalación eléctrica y de incendios.
No obstante, según el edil de Obras y Urbanismo, las dos actuaciones más importantes que se han realizado son las de convertir la cueva en accesible para personas con discapacidad o movilidad reducida a través de la instalación de un ascensor y con la comunicación de las dos galerías, así como la creación de una salida de emergencias.
Estas acciones forman parte del proyecto que el Ayuntamiento creó en sustitución del taller de empleo solicitado a la Junta en 2013 pero que ésta denegó, para recuperar la cueva. A eso hay que añadir un plan de empleo de la Diputación que ha sufragado los gastos de personal.
Además, también se han recuperado las barricas encontradas en la cueva gracias a un taller de empleo de tonelería de la Junta de Castilla-La Mancha.
Hay que recordar que el Ayuntamiento de Valdepeñas inició los trámites para adquiri la bodega Los Llanos en el año 2005 a través de un PERI, gracias al que el Consistorio se quedaba con 3.500 metros cuadrados de la misma, mientras que Vinartis se quedaba con 2.500 metros cuadrados.
Las obras de rehabilitación comenzaron en 2009, con la primera fase, a través de un crédito de 1.700.000 euros de la Secretaría de Estado de Turismo. La finalización de esta primera fase y la segunda se harían más adelante por 300.000 euros.