Por ello, la Concejal ha destacado el aumento de este volumen de trabajo, que se viene produciendo además desde hace cuatro años. “Esto indica por un lado, la capacidad de trabajo que tiene la agrupación y su profesionalidad, y por otro, se pone de manifiesto el hecho de que el Equipo de Gobierno está haciendo un esfuerzo a la hora de preservar la seguridad en los actos que realiza y de dotarlos de los medios que puedan requerir a la hora de realizar sus intervenciones”.
De los servicios que realizaron, un 45.5% fueron de carácter preventivo (los que se organizan normalmente para eventos a petición de distintas concejalías) y un 32.5% estuvieron relacionados con alertas y retenes (incendios, heladas, avisos metereológicos, salidas y regresos de vacaciones). Esta cifra ha subido considerablemente, pues venía suponiendo el 12% de los avisos aproximadamente. Un 13% fueron avisos por servicios de emergencia y un 9% de particulares.
En concreto, y en lo que tiene que ver con los avisos recibidos vía emergencia 112, según Ruiz el 2016 fue un año con emergencias “bastante importantes”. Los voluntarios acudieron a dos accidentes múltiples, el que hubo en mayo en la A-4 a la altura de Santa Cruz de Mudela y el que se produjo en Manzanares en agosto. Y fue precisamente ese mes el que más “saturación” hubo, pues se acudió también al
escape de amoniaco que hubo en una empresa, a la explosión de gas del bar del Canal y a un incendio de monte bajo en la pedanía de Consolación. Además trabajaron en nueve inundaciones en viviendas.
Durante el año pasado, y a nivel de medios materiales, se dotó a la agrupación de un camión-bomba, cedido por el GEACAM y la Consejería de Agricultura.
Se realizaron 17 charlas de sensibilización en institutos, centros sociales y en el Centro de Mayores del Lucero y se contabilizaron hasta 27 colaboraciones con otras agrupaciones de Protección Civil. En concreto fueron con Socuéllamos, Manzanares, La Solana, Almuradiel, Argamasilla de Alba, Villanueva de los Infantes, Cózar, Montiel, Santa Cruz de Mudela, Moral de Calatrava, y fuera de la provincia, en Urda y Madridejos.
Además, se participó en cinco simulacros y los voluntarios participaron en 13 cursos ofertados por la Escuela de de Protección Ciudadana, que se suman a los quince ejercicios que de forma interna hicieron para mejorar sus intervenciones.
