Los 475 ejemplares que estuvieron disponibles desde el jueves 23 se agotaron ya por completo en la tarde del sábado, un día antes de la clausura de la feria. Así, el colectivo almodovareño recabó, junto a donativos y la venta de gafas y otros artículos de la AECC, una importante cuantía destinada a cubrir los gastos que se generan al atender a vecinos afectados por la enfermedad y también a promocionar la investigación.
“No podíamos esperar tan grata acogida, porque el mal tiempo que ha habido este año nos hacía pensar en que acudiría menos gente a la feria y no ha sido así, todo lo contrario”. Son palabras de la presidenta de la Junta Local de la AECC de Almodóvar del Campo, Paloma Ramírez, que aprovecha para lanzar un agradecimiento a cuantas personas adquirieron alguna planta.
Entre las variedades que se pudieron adquirir había ciclamen, azaleas, flor de paja tulipanes, rosales, pelargonios, dimorfotecas, cinerarias, margaritas, cactus, begonias, flores de interior, cintas, pendientes, potos, plantas de fresas o violetas. Muchas de ellas procedían de Holanda, dado las gélidas temperaturas habían mermado la producción nacional.
Ramírez quiere agradecer una vez más la implicación de los voluntarios del colectivo que colaboraron en la venta, en el envasado de los ejemplares y en la reposición que hubo que hacer en la mañana del sábado yendo al vivero a por las existencias que quedaban y ya esa tarde se agotaron.
También hace extensivo su gratitud para con la farmacéutica Marta Puebla, “por su labor desinteresada con esta asociación, al poner su farmacia llena de plantas y colaborar también en la venta de las mismas”.
