viernes. 29.03.2024

El Ayuntamiento de Valdepeñas es condenado en sentencia firme por ocupación ilegal de terrenos

Mediante la presente redacción, no pretendo otra cosa que poner en conocimiento de toda aquella persona que se preste a leerla, un hecho que dice mucho la forma de actuar que tiene el Ayuntamiento de Valdepeñas, y alguno de los máximos responsables del mismo, y que paso a describir. Mediante la presente redacción, no pretendo otra cosa que poner en conocimiento de toda aquella persona que se preste a leerla, un hecho que dice mucho la forma de actuar que tiene el Ayuntamiento de Valdepeñas, y alguno de los máximos responsables del mismo, y que paso a describir. 

Mediante la presente redacción, no pretendo otra cosa que poner en conocimiento de toda aquella persona que se preste a leerla, un hecho que dice mucho la forma de actuar que tiene el Ayuntamiento de Valdepeñas, y alguno de los máximos responsables del mismo, y que paso a describir. Mediante la presente redacción, no pretendo otra cosa que poner en conocimiento de toda aquella persona que se preste a leerla, un hecho que dice mucho la forma de actuar que tiene el Ayuntamiento de Valdepeñas, y alguno de los máximos responsables del mismo, y que paso a describir. 

Allá por el año 2008, el Ayuntamiento de Valdepeñas se pone en contacto con mi familia para solicitarnos una cesión de 92,73 m2 a cambio de edificabilidad en unos terrenos situados en la zona del “nuevo Valdepeñas”, ya que se iba a realizar una ampliación del carril que avanza en dirección norte hacia “el ángel”. Tras sopesar la propuesta, se decidió aceptarla, aun sabiendo que la edificabilidad poco valor tenía ya, pero creyendo que era mejor facilitar las cosas, y que las personas que gestionaban el Ayuntamiento de nuestro pueblo, y que llevaron a cabo esta actuación, tenían una palabra de la que, posteriormente, han demostrado no disponer, según mi opinión.

Al comenzar las obras, nos dimos cuenta de que, en lugar de los 92,73m2 acordados y suscritos en un convenio, el Ayuntamiento se había apropiado de mucho más terreno, finalmente resultaron ser 472,90 m2, apenas nada, solo cinco veces lo acordado, y que las obras no eran una ampliación del carril, sino una rotonda (otra más), que no constaba en el plano que se nos presentó inicialmente y que estaba suscrito por ambas partes. La reacción fue la lógica, nos pusimos en contacto con el Ayuntamiento que, evidentemente, desoyó las quejas, negó la mayor, y continuó con las obras como si tal cosa hasta su entera finalización, claro el terreno no era suyo, con lo cual duele menos.

Ante esta actitud, el Ayuntamiento te obliga a acudir a los Tribunales de Justicia y reclamar lo que en derecho te corresponde, y así se hizo. Tras cuatro años de litigio en los cuales esta parte ha tenido que incurrir en no pocos gastos, los propios que supone acudir a la vía judicial, finalmente, el 17 de Noviembre de 2015, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla La Mancha dictó sentencia y condenó al Ayuntamiento de Valdepeñas, y a la empresa ejecutora de los trabajos a abonar a mi familia una cantidad que, entonces era de 54.820,51 €.

“procede declarar el derecho de los recurrentes a ser indemnizados por la real superficie ocupada ilegalmente, 380,17m2…”

Sin embargo, el Ayuntamiento a pesar de ser perfecto conocedor de dicha Sentencia, que es firme, ni ha procedido al pago de dicha cantidad, ni se ha puesto en contacto con esta parte, obligando de nuevo, a iniciar un procedimiento judicial de ejecución de sentencia, lo que implica un aumento de la cantidad, que ahora se calcula en más de 80.000 € por los intereses que se van devengando y que, finalmente, le tocará abonar a los ciudadanos de Valdepeñas que es de donde sale el dinero para reparar las consecuencias de la forma de actuar del Ayuntamiento.

Esta es la verdadera forma de actuar de algunas de las personas que gestionen el “interés público” en Valdepeñas; ocupar lo que no es suyo de forma ilegal (según la propia sentencia), obligar al ciudadano a iniciar una batalla judicial, generarle gastos a dicho ciudadano, y también al propio Ayuntamiento, y después retrasar todo lo posible el pago de la cantidad a la que ha sido condenado, si es que alguna vez tiene a bien pagarla, como es su obligación legal.

La cuestión se torna bien distinta cuando se invierten las posiciones, y el Ayuntamiento es el acreedor, como pudiera ser el caso de alguno de los tributos con los que se oprime el poder adquisitivo de los ciudadanos. En este caso, ante el impago de dichos tributos por cualquier vecino, la vía de apremio es implacable y rápida. De esta forma, el Ayuntamiento (no el pueblo, no hay que confundir), nunca pierde.

Pues bien, opino, y creo que de forma lógica, que no es esto lo que se espera de una administración pública ni de las personas que la gestionan, y menos en un pueblo donde se supone que la administración debe ser más cercana con el ciudadano,  están ahí para menesteres bien distintos. Le consta, al que suscribe, que no es el único que viene sufriendo situaciones similares, soy conocedor de algún caso más de ciudadanos que han sido obligados a acudir a la justicia para reclamar lo que es más que obvio y que, una vez otorgada la razón por la justicia, el Ayuntamiento incumple o al menos retrasa sus obligaciones, generando un perjuicio personal difícilmente reparable. Estaré encantado de dar nombres y datos, si así soy requerido  para ello.

Lamento enormemente que estas cosas ocurran con el Ayuntamiento de Valdepeñas,  y se den situaciones de este tipo y se usen los cargos encomendados de forma tan poco apropiada, pues dichas situaciones son fácilmente evitables siempre que haya voluntad para ello.

El Ayuntamiento de Valdepeñas es condenado en sentencia firme por ocupación ilegal de...