jueves. 28.03.2024

Saber perder

Siempre se ha dicho, en el deporte, en el juego, en la profesión, en las amistades, en los avatares de la vida, que: “Hay que saber perder”. Y cuando un dicho popular tiene tanto arraigo como este, hay que tomárselo en serio, porque en el fondo tiene mucho de verdad. Cuando el pasado miércoles día 27 tomé la decisión de presenciar íntegro el debate en el Congreso de los Diputados, me encontré la sorpresa donde no la buscaba. Sentía curiosidad de ver como reaccionaba el nuevo Gobierno y la nueva Oposición. Bueno; la verdad es que.. sorpresa, sorpresa, tampoco mucha.

Ví, en primer lugar, a un nuevo presidente, que en un espacio de tiempo muy corto, ha sabido adaptarse a una nueva realidad. Otra forma de hacer política. Un significativo cambio de discurso, en la forma y en el fondo. Dejó muy patente, que el diálogo y el acercamiento, sin exclusiones, es la clave para hacer frente a los muy graves problemas actuales. Me llamó la atención sobremanera el convencimiento de que los problemas sin la proyección hacia Europa no tienen solución. Espero que España vuelva a recuperar el liderazgo en Europa que tuvo en otras etapas.

¿Y la oposición? En general, dentro de las lógicas discrepancias, tuve una aceptable impresión. Bueno; con dos sonadas excepciones. Las excepciones de quienes “no han sabido perder”. Arbert Rivera y su partido no han asimilado que el lugar ocupado en las encuestas era ficticio, era artificial. No se podía sostener sin más programa que la “Unidad de España”, y con posiciones programáticas que cambian, de un día para otro, según sople el viento. Y claro: subiendo el Angliru les ha entrado la pájara. No son capaces de asimilarlo. No saben perder.

Y el PP, como de costumbre: o gobiernan, o crispación que te crió. Ya no es que no sepan perder, que no saben; es que no conciben que nadie pueda gobernar. Solo ellos saben gobernar; los demás son otra gente. El que llega al gobierno, es que lo hace por la puerta de atrás, lo hacen de forma ilegítima, valiéndose de triquiñuelas. El PSOE ha llegado al poder con el apoyo de populistas, independentistas y amigos de terroristas. No Sr. Hernando; no Sr. Rivera. El PSOE ha llegado al poder porque la democracia tiene mecanismos para corregir situaciones insostenibles. Insostenibles desde el punto de vista ético, social y político. No lo quien admitir. No saben perder.

Saber perder