miércoles. 15.05.2024
Las Historias de Kuka

Capítulo XIV. Desgastada por la vida

Querida Kuka:
Leo estas líneas y casi no te reconozco. Entiendo por lo que estáis pasando la mayoría en nuestro país. Aquí los medios sólo dan mala publicidad del mismo, en vez de resaltar las virtudes que tiene, que son muchas.

Luego bien que se van todos en verano a comerse nuestras paellas, y a emborracharse, para después hacer lo que aquí no pueden, como cangrejos paseando por nuestras ciudades.
Creo que estás viendo demasiado la televisión. La calle es otra cosa y el día a día también. ¡Con lo práctica y lo guerrera que eres! Pronto estaré contigo. Te mando fuerzas y una botellita de té escocés para que sigas adelante.
Alertada por Julia, mi amiga Flora me ha venido a visitar. Recuerdo cuando nos conocimos. Echaba horas en una cafetería mientras estudiaba y una tarde apareció. Frágil y con una belleza muy Audrey Hepburn. Desde aquel momento nos hicimos muy amigas.Pues bien, alertada por la Julia, aquí la tengo, tomando té conmigo.
Flora: Kuka, así no puedes seguir, quiero positivismo, no te dejes arrastrar por la corriente. Mírame a mí. Me dejó mi novio por mi mejor amiga y después éste la dejó por otro. Cuando reventó la burbuja, adiós a los bolsos de Tous. Estoy vendiendo aspiradoras por teléfono y aquí sigo, con ganas de luchar y de encontrar a ese adecuado y maravilloso ser que está ahí esperándome. ¿Recuerdas aquella vez cuando íbamos en tu Renault cinco y un camión del banco le arrancó la parte delantera del coche?
Kuka: Sí, me salí del coche, le dije de todo, cojí el guardabarros, lo metí en el maletero y salimos pitando a la chatarra a ponerle otro. Fíjate si ya hace, que estaban los maniquíes de moda por entonces, pues los tenían sentados dentro de los coches en venta. ¡Menudas risas! Mereció la pena pagar por eso. Después nos fuimos de compras y las abuelas esperando los churros en la cafetería.
Flora: Y la Kuka aventurera que me llevó al Ikea con Lucía y después de comprar no cabía nada en el coche y nos pusiste como a los demás paquetes.
Kuka: ¡La cara que ponía la gente por la autovía viéndote aplastada contra el cristal! ¡Ay si nos paran!
Flora: ¿Qué íbamos a hacer si nos dejas en tierra y sin pelas para buscarnos la vida?
Kuka: La aventura tiene sus riesgos .
Flora : ¿Dónde está la Kuka que yo conozco?
Kuka: Desgastada por la vida.

 

Capítulo XIV. Desgastada por la vida