Según informan desde Cruz Roja, el guía ayudó a los senderistas a conocer numerosos datos sobre la batalla de las Navas de Tolosa, al mismo tiempo que observaban la vegetación, quejídos con líquenes, madroños, castaños, enebros, pino de repoblación y la estrella del parque, un bosque de robles melojos, musgo e infinidad de arroyos.
En definitiva recorrieron zonas de bosque espeso, con setas, níscalos, amanitas, además de la calzada romana del Empedraillo, las ruinas de Castro Ferral, la Mesa del rey, el barranco de Valdeazores y al final una comida en los jardines de Despeñaperros, participando senderistas de La Solana, Albacete, Manzanares, Puertollano, Vilchez, La Carolina y Argamasilla.