Pasaron por varios cortijos y por extraordinarias formaciones geológicas como la Piedra del Agujero, en cuanto a la flora, las peonias dieron un toque de color, junto a las globularias y demás especies.
Continuaron el camino por innumerables arroyuelos hasta llegar otra vez a la Peña del Olivar, concretamente hasta su área recreativa y Jardín Botánico. Una ruta de 12,5 km, con un desnivel de 675 mts, y un 90% de senderos, Mención especial a José Luis y señora del Camping Rio Los Molinos por hacer que esa comida fuese inolvidable.
Después de la comida se desplazaron hasta la población de Siles, muy serrana en el entramado de sus calles, estrechas y con muchos restos de su historia. El guía local Enrique explico detenidamente la historia de Siles, desde los moros pasando por Rodrigo Manrique, comendador, y en especial la Casa Tercia y el "Cubo", Una pena no haber contado con más tiempo, quedando por visitar el Centro de Interpretación, que dejaron para la próxima.